El trineo de viento: 5.000 km por el hielo de Groenlandia con un invento español

Larramendi es uno de los componentes del equipo internacional de expedicionarios, que comenzarán el viaje el próximo 1 de mayo. La Primera Circunnavegación de Groenlandia es un recorrido de 5.000 kilómetros por su desierto interior helado, como puede verse en el mapa al final de estas líneas.

Este grupo de elite está compuesto, además de por Larramendi, por los ingenieros españoles Manuel Olivera y Eusebio Beamonte, la danesa Karin Moe Bojsen y el groenlandés Hugo Svensson. Desde España, participarán en su coordinación Juan Manuel Viu -exresponsable de la base antártica Juan Carlos I (2008-2009)- y Javier Selva.

El Trineo de Viento navega a 10-12-15 kms por hora, aunque puede alcanzar hasta 40 kms/h en algunos momentos. En el camino, el grupo se detendrá en diferentes bases científicas y recogerá muestras para estudiar el cambio climático.

En este viaje a Groenlandia se podría batir el récord de distancia recorrida en un solo día: más de 500 kilómetros en 24 horas. Se optó por mayo-junio porque en estos meses hay luz solar prácticamente las 24 horas del día, y la temperatura no bajará de los -30 grados. Los expedicionarios se turnarán como pilotos, para estar en marcha el mayor tiempo posible. «Los anteriores expedicionarios (Lonnei Dupre y John Hoelscher) que lo intentaron con medios de transporte no contaminantes (trineos con perros y kayak) tardaron cinco años, entre 1997 y 2001. ¡El equipo del Trineo de Viento invertirá sólo 45 días!», explica Larramendi.

El catamarán puede moverse con vientos que van desde los 6 a los 60 kilómetros por hora. Además, las cometas son capaces de aprovechar vientos que no van en la misma dirección del trineo, lo que se consigue subiendo y bajando las cometas con diferentes líneas (que van de 150 metros a 300 metros de longitud) en función de las corrientes, como hacen los globos aerostáticos. Las cometas llevan únicamente dos mandos o líneas (cuerdas/dinema) que enlazan en una polea. El piloto tira de un lado o de otro, moviendo el perfil de la cometa de un lado a otro para que no se caiga. El despegue de la cometa es el momento más complicado, en función del viento y la superficie. La línea de 300 metros dificulta esta operación si el territorio es rugoso o si hay poco viento, pero con una velocidad standar (unos 15 kms/h) no resulta complicado.

Quien quiera conocer más detalles sobre esta expedición, podrá conocerlos de primera mano. El próximo 22 de abril, a las 19.30 horas, Larramendi ofrecerá una conferencia, organizada por la Sociedad Geográfica Española, en el Salón de Actos del Instituto Geográfico Nacional (C/General Ibáñez de Ibero 3, Madrid), dentro del ciclo Encuentros de Exploración y Aventura. La entrada es gratuita, pero es imprescindible confirmar asistencia en: confirmaciones@sge.org.