Dónde está y qué ver en el castillo de la serie 'Miércoles'

La principal localización de la ficción es la Academia Nevermore, donde Miércoles Addams es internada tras ser expulsada de varios colegios, un lugar mágico en el que convive con sirenas, hombres lobo y gorgonas. Pues bien, este edificio, que presenta ciertas modificaciones para que se asemeje a la mansión Addams, existe en la realidad y se trata del castillo de Cantacuzino.

Situada en Busteni, con vistas al valle de Prahova, al pie de la montaña de Zamora, esta fortaleza se alza majestuosa entre la naturaleza desde 1911, año en el que construida a petición del príncipe Gheorghe Grigore Cantacuzino, un político rumano elegido dos veces alcalde de Bucarest y nombrado primer ministro de Rumanía entre 1899-1900 y durante 1904-1907. Hombre de gran riqueza, construyó tres grandes edificios: el Palacio Cantacuzino, en Calea Victoriei (Bucarest), que alberga en la actualidad el Museo Nacional 'George Enescu', otro palacio en Floresti, ahora en ruinas, y el castillo que nos ocupa.

Tras fallecer en 1913, el complejo permaneció en la familia hasta 1948, momento en el que fue nacionalizado y todos sus muebles originales y obras de arte fueron saqueados y pasó a convertirse en un hospital. Cuando el presidente Nicolae Ceaușescu fue derrocado, en 1989, le fue devuelto a la bisnieta de Cantacuzino, Ioana. En 2008, el abogado y promotor inmobiliario alemán Kurt Neuschitzer lo compró con idea de crear en sus terrenos un campo de golf y una estación de esquí. Finalmente decidió restaurar el castillo invirtiendo unos 3,1 millones de dólares. En 2015 inauguró la Galería de Arte del castillo para mostrar el trabajo de artistas famosos. En la actualidad, este espacio acoge, hasta el 26 de febrero, una exposición bautizada 'Goya & Dalí. Controversials' en la que el visitante puede admirar más de 100 grabados y litografías de ambos artistas españoles, todas pertenecientes a la colección privada de arte europeo del abogado George Şerban.

Construido en estilo neo-rumano, el castillo de Cantacuzino está rodeado por un parque cuyos senderos conducen a cascadas, fuentes y una gruta. El edificio, que cubre un área de 2.148 metros cuadrados, fue hecho de piedra y ladrillo según los planos del arquitecto Grigore Cerchez y su construcción tomó casi 10 años.

La decoración muestra un ambiente interior con un marcado carácter romántico. Vidrieras, estucos, techos con vigas vistas, balaustradas de madera, piedra o hierro forjado, herrajes fundidos en bronce y ricamente ornamentados representan una maestría del oficio artístico. Las chimeneas de piedra de Albesti adornadas con mosaicos policromados completan el ambiente de una residencia noble aumentando el valor del edificio. Cuenta con una colección de heráldica que presenta los escudos de las familias nobles encarceladas con los Cantacuzinos y un friso de pinturas votivas con los miembros ilustres de la familia.

En el interior destacan el vestíbulo, con suelos de mosaico rumano y un banco de piedra tallada y pintada con una cruz celta, el salón de honor, con pinturas realizadas sobre cuero cordobés, la escalera de mármol, con una barandilla de hierro realizada en estilo art nouveau y decorada con vides en la voluta, el salón principal, cuyo suelo que está acabado con cerámica italiana data de principios del siglo XX, y la galería exterior, de estilo Brâncovenesc –estilo de finales del siglo XVII y principios del XVIII que mezclaba detalles bizantinos, otomanos y del Renacimiento tardío– con columnas de piedra.

De la parte exterior cabe resaltar la puerta principal, de hierro macizo con el monograma del príncipe, una cueva situada en la base del patio del palacio, el patio interior que conduce hasta una iglesia de madera construida por la familia Cantacuzino y la torre de caza, que levantada en el lado este se utilizó para la observación de los animales de la zona.

El complejo, que también cuenta con el restaurante Canta Cuisine, está abierto al público y se puede alquilar para organizar cualquier tipo de evento, desde una boda, pasando por un cumpleaños, o una reunión de trabajo. Disponen de diversas salas adaptadas y, durante los meses de verano, se pueden montar carpas en el jardín. Además, se pueden realizar diferentes actividades en sus jardines como paseos en bici o a caballo, tiro con arco o tirolina.