Entre Huelva y Ayamonte: la sabrosa ruta de la caballa

Iniciamos el recorrido en Ayamonte, Huelva, de donde no conviene marcharse sin recorrer su viejo barrio histórico encalado , su puerto y sus playas de arena fina. Muy cerca se encuentra el paraje de Isla Canela. Salpicado de canales y marismas, este pueblo marinero, es hoy uno de los grandes centros turísticos del litoral onubense. Toda esta zona sureña está protegida por formar parte del Paraje Natural de las Marismas de Isla Cristina . Cientos de aves migratorias anidan en este privilegiado lugar.

En el siglo XVIII, Isla Cristina, a la que se llega por la N-431 desviándose en El Empalme por la A-5150, pasó a manos de la Corona con el curioso nombre de La Higuerita. En 1924 se le otorgó el nombre que hoy ostenta. Su puerto merece un recorrido sosegado.

Volviendo de nuevo a la A-49 o a la A-431, dirección Huelva, se llega al pueblo de Lepe . En sus tierras, el cultivo de fresones constituye un importante foco de riqueza de Andalucía occidental. La localidad conserva monumentos de gran valor histórico como la capilla de San Cristóbal y la torre del Catalán. Su playa es La Antilla, a la que se accede por la A-5056.

En la costa, entre La Antilla y Punta Umbría, se encuentra la Flecha de El Rompido , una lengua de arena bañada por las aguas del río Piedra y el Atlántico. Desde Cartaya se baja hasta allí por la A-5053. El Rompido es un pueblo típico de pescadores. Finalmente, pasado Punta Umbría y sus Enebrales, así como el Paraje Natural de las Marismas del Odiel, nos aguarda Huelva.

La ciudad se articula en torno a la plaza de las Monjas. A las afueras, en la desembocadura del río Tinto, se alzan el monumento a Colón , una colosal escultura que se ha convertido en el símbolo de la provincia, y el monasterio de la Rábida. Un final evocador de la aventura del almirante genovés para la ruta de la caballa de Andalucía, focalizada en la franja costera de Huelva.

Esta denominación cubre municipios de todo el litoral andaluz desde Ayamonte, en Huelva, hasta Garrucha, en Almería. Para capturarla se usa el método de la almadraba , ideado por los árabes, que consiste en una gigantesca trampa de redes y cables que se lanza al mar. La caballa, también llamada sarda, es un pescado azul de cuerpo alargado en forma de huso, boca puntiaguda y ojos grandes.

Normalmente tiene entre 20 y 30 cm de largo, aunque puede llegar a los 50. Los filetes de caballa son de un color blanco grisaceo y su textura es compacta. En el proceso de elaboración no se utilizan productos químicos, aditivos

Pescado azul de gran valor nutricional , la caballa contiene grasa de buena calidad con un elevado porcentaje de ácidos grasos omega 3. También es fuente de minerales -fósforo y selenio- y de vitaminas como B6, E, y, sobre todo, B12 y D. 100 gr de caballa aportan más del doble de las necesidades diarias de las vitaminas del grupo B.

Las caballas, melvas, atunes, pargos, corvinas, chocos, lenguados o salmonetes llenan los platos en la costa de Huelva, desde Ayamonte hasta Punta Umbría. Resultan deliciosos a la plancha, fritos o en diversos guisos. Hay que probar, por ejemplo, el choco con patatas o con habas frescas de temporada.

La alfarería está representada por las pulperas (vasijas de boca ancha que utilizan los pescadores) de Trigueros. Otros ejemplos de artesanía local son las piezas decorativas de Aracena, los azulejos de El Condado y las macetas y cántaros de Andévalo. La afición por la equitación explica el gran número de talleres de guarnicionería que existen en la provincia. Los botos de Valverde del Camino gozan de fama internacional.

En las Fiestas Colombinas de Huelva se celebra, el 3 de agosto, la salida de las carabelas de Colón del puerto de Palos. El segundo fin de semana de mayo tiene lugar en Lepe la Romería de Ntra. Sra. de la Bella y el 16 de junio destaca la celebración de la fiesta del Carmen en Isla Canela.

Las Marismas del Odiel, Reserva de la Biosfera y Paraje Natural, se originaron por la interacción sedimentaria de los ríos Tinto y Odiel y el océano Atlántico. La riqueza faunística de este humedal andaluz incluye la mayor colonia de crías de espátulas de Europa. En su interior está el Centro de Calatilla que ofrece información sobre las marismas y la forma de recorrerlas.

El monasterio de Nuestra Señora de La Rábida toma asiento sobre una pequeña colina que domina la desembocadura de los ríos Tinto y Odiel. Fue edificado entre los siglos XIV y XV sobre las ruinas de un edificio almohade. Situado a siete km de Palos de la Frontera, es un magnífico ejemplo de arquitectura mudéjar andaluza. A sus pies se halla el Foro Iberoamericano de La Rábida, donde se desarrollan actividades de carácter cultural a lo largo de todo el año.

Fuente: Guía Repsol .