Arcos de Valdevez: unión de naturaleza, historia, sabores...

Arcos de Valdevez ocupa páginas decisivas en la Historia de Portugal. En 1141 fue escenario del Recontro de Valdevez (Batalla de Valdevez), episodio decisivo para la afirmación de Afonso Henriques y el nacimiento del país. De ahí el lema 'Arcos de Valdevez, donde se hizo Portugal'. Su Centro Histórico, moldeado por el curso del río Vez, es un verdadero museo al aire libre,: casas tradicionales, callejuelas sinuosas, monumentos seculares, etc.

Su gastronomía es una verdadera celebración de la tradición y los productos locales. Entre los platos típicos, destacan el Cozido à Moda dos Arcos, el Cabrito das Serras y, sobre todo, la suculenta carne Cachena con el tradicional Arroz de Feijão 'Tarreste' (Arroz de Alubias 'Tarreste'). Todo acompañado, por supuesto, de un auténtico vino verde tinto de la variedad Vinhão. Para endulzar la experiencia, nada mejor que disfrutar de los dulces locales: el Bolo de Discos (Pastel de Discos), los delicados Charutos dos Arcos (Cigarros de Arcos) -una de las 7 Maravillas de Portugal)-, y los famosos Caramelos Arcos.

Puedes descubrir este incomparable lugar en el mundo a través de tres rutas:

Soajo y Peneda: La Ruta de la Naturaleza y la Espiritualidad. Explora la parte oriental, centrada en el Parque Nacional de Peneda-Gerês, desde Porta do Mezio (con parque biológico, centro de interpretación y senderos para todas las edades). Sigue por el Santuario de Nossa Senhora da Peneda (Monumento Nacional): subir su escalera barroca es una experiencia espiritual, flanqueada por las estatuas de las Virtudes: Fe, Esperanza, Caridad y Gloria. La última parada, Soajo, donde el tiempo parece haberse detenido entre hórreos centenarios y calles de granito.

Sistelo: Paisaje Cultural y Rutas Literarias. Al norte del municipio, esta ruta te lleva hasta el emblemático Pueblo de Sistelo (en coche o a pie a lo largo de la Ecovía do Vez, un sendero de 35 km entre pasarelas, desagües, etc.).

Santa Cruz y Miranda: Tesoros Escondidos. Atraviesa la zona menos conocida, pero repleta de joyas naturales e históricas. En Santa Cruz se conservan las ruinas del antiguo castillo medieval y el Santuario de Nossa Senhora do Castelo, con el hermoso Miradouro de Santa Cruz. Sigue hacia el místico Bosque de Miranda y la cascada del río Cabrão (más de 300 metros) y finaliza con los Fuertes del Extremo, construidos para la defensa durante la Guerra de Restauración (1640), testimonio de la importancia geoestratégica de esta región fronteriza.