Risco de Levante: el sendero onubense entre los más bonitos de España

Santa Ana la Real cuenta con un patrimonio natural impresionante . Esta pequeña localidad, de casas blancas y calles empedradas, se configura como todo un referente respecto al deporte en la naturaleza, habiendo sido pionera, por ejemplo, en la introducción del nordic walking en la Península. De hecho, Santa Ana la Real se convertirá del 17 al 20 de marzo en la capital mundial de la Marcha Nórdica gracias al primer Congreso Internacional de esta disciplina , que ha sido presentado en la Diputación Provincial, principal entidad colaboradora de este evento de primer nivel.

Además, Santa la Real destaca también por otros atractivos como la señalización de senderos de pequeño recorrido, el senderismo accesible o la protección y recuperación de los caminos públicos frente a la usurpación ilegal. Una localidad en definitiva, con una extensa tradición senderista y que pone de manifiesto el compromiso de esta población con su patrimonio natural y cultural, destacando las múltiples rutas con las que cuenta el municipio y que comparten partes de su recorridos con el trazado del sendero Risco de Levante .

A lo largo del sendero, existen diferentes rutas como la del Bosque de las Letras, la Ruta Geológica, la Ruta Astronómica y la Ruta de los Hornos de Cal. A través del camino, es posible disfrutar de dehesas de alcornoques, bosques de ribera y de algunas de las vistas más hermosas de la vertiente sur de la Sierra. El verdor de esta zona de Andalucía y el abundante caudal de sus riveras son algunos de los atractivos más importantes de este sendero, aunque sin embargo, nos encontramos ante uno de los puntos de mayor concentración de lluvias de la Península. Entre su flora, destacan las encinas, el alcornoque, los madroños, los chopos, la jara y el enebro. También ocupan un lugar destacado los hongos y setas, con las tanas y los gurumelos como los más destacados.

Por su parte, la fauna de la zona está formada principalmente por mamíferos como ciervos, jabalíes, zorros, ginetas, meloncillos y nutrias; aves como el buitre negro, el milano, la cigüeña negra o el martín pescador; y una gran variedad de reptiles y anfibios, destacando el tritón jaspeado y el sapo partero. Pero el protagonista no es ninguna de estas especies, sino el famoso cerdo ibérico, criado aquí en régimen de montanera y uno de los grandes culpables de la rica gastronomía local.

El punto de inicio del sendero está situado en las inmediaciones de la Fuente de los Tres Caños en la localidad de Santa Ana la Real. Siguiendo la calle que se dirige hacia las afueras del pueblo, el sendero nos dirige hasta la aldea de La Presa a través de un callejón entre muros de piedra que, en paralelo a la carretera que une Santa Ana con Alájar, va enlazando huertas y prados hasta alcanzar la Rivera del Barranco de Los Casares .

Desde la salida, esta primera parte del recorrido comparte trazado con el Bosque de las Letras , adaptado además para que sea accesible a personas con discapacidad. Esta primera parte de la ruta también comparte recorrido con el primer sendero nocturno de la provincia que cuenta con señalización diseñada para poder ser vista de noche.

Nuestro recorrido en cambio, sigue el curso del arroyo hasta alcanzar la Casa de la Rivera, donde el camino se bifurca en dos direcciones. Si seguimos por la izquierda, debemos subir una pequeña pendiente hasta llegar a un muro en el que giraremos a la derecha para bajar hasta la Rivera de Los Casares . Desde este punto también podemos visitar, desviándonos ligeramente de nuestro sendero, los Chorros de Joyarancón . Continuando por nuestra ruta, el trazado del sendero discurre hacia un valle cada vez más estrecho hasta que, imponente, se alza frente a nosotros la mole del Risco de Levante . Este gigante de roca, que da nombre al sendero, es muy apreciado por los escaladores y está equipado con varias vías deportivas, así como con un puente tibetano. Poco a poco, el sendero va saliendo del valle, girando hacia las grandes dehesas que se abren por el sur.

Un extenso sendero del que desde ABC, te proponemos algunos puntos de su recorrido que no te puedes perder :

Esta mole rocosa de en torno a 15 metros de altura da nombre al sendero. Se trata del primero de los grandes afloramientos de piedra que se pueden contemplar en las laderas de los montes que conforman el valle. Es un lugar perfecto para la escalada y como se ha mencionado previamente, está equipado con varias vías de escalada deportiva, así como con un puente tibetano.

El inicio del recorrido coincide con parte de una de las rutas turístico-culturales más características de la zona , El Bosque de las Letras. A lo largo de su recorrido, podemos encontrar diferentes puntos de lectura con textos de autores de la comarca, además de textos escritos por alumnos de los colegios de la zona, que cuelgan en algunos árboles. Como curiosidad, también se encuentra un interesante «intercambiador» de libros del que podremos coger alguno, o donarlo.

Este particular y sencillo monumento cuenta con un origen un tanto peculiar, a caballo entre la leyenda y la realidad, ya que se cuenta que fue construido a principios del siglo XIX para servir de puesto de vigilancia en la Guerra de Independencia contra Francia. Además, se trata de otra de las paradas de la Ruta Astronómica de la zona .

Otra de las rutas de Santa Ana que comparte parte de su recorrido con el sendero Risco de Levante es la Ruta Astronómica. Tras la dura subida del Muro, llegamos a este punto informativo donde, además de poder disfrutar de unas vistas impresionantes a la vertiente sur de la Sierra , también es posible deleitarse con unos cielos nocturnos ideales para la observación de las estrellas .

Como se puntualiza anteriormente, a pesar de que este salto de agua no está situado en el recorrido del sendero, merece la pena visitarlo, sobre todo en época de lluvias . Aproximarse a contemplar esta emblemática cascada de más de quince metros de altura puede ser quizá uno de los grandes atractivos visuales de esta zona. Para acceder a ella debemos cruzar la rivera a la altura del intercambiador de libros y seguir el sendero hacia la izquierda, pasando por debajo de la carretera por un pequeño túnel.

Prácticamente al final del recorrido, ya casi entrando de nuevo en Santa Ana , nos encontramos con los restos de varios de los hornos de cal que existieron en el municipio y en donde se elaboraba cal viva , utilizada para enfoscar y pegar mampuestos.