Macharaviaya: el pueblo malagueño que rinde homenaje a Bernardo de Gálvez, el héroe de la independencia americana
Esta pequeña localidad de la comarca de la Axarquía festeja el 4 de julio por todo lo alto con un homenaje al militar que llegó a ser gobernador de La Luisiana y virrey de la Nueva España
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Pablo Marinetto
Málaga
Aunque a solo un paso del turístico municipio de Rincón de la Victoria, el pequeño pueblo de Macharaviaya destaca por ser un remanso de paz durante todo el año. Apenas 500 habitantes disfrutan de la tranquilidad que ofrece su ubicación en mitad de los ... montes de la Axarquía malagueña, pero hay una fecha en el calendario, el 4 de julio, en el que se rompen todos los esquemas y el bullicio inunda las empinadas y estrechas calles de este rincón malagueño que llegó a ser considera como «la pequeña Madrid» gracias a una saga histórica.
Este pasado fin de semana, el municipio ha vuelto a homenajear un año más a su vecino más ilustres, Bernardo de Gálvez, considerado un héroe de la independencia americana. Este militar malagueño, nacido en Macharaviaya en 1746, llegó a ser gobernador de La Luisiana y virrey de la Nueva España y aunque su figura ha pasado desapercibida durante años, ya son catorce ediciones de este evento en el que se rememoran sus hazañas al otro lado del Atlántico.
Es una de las figura hispanas que los americanos no desprecian. Hasta el punto que su retrato, obra de Carlos Monserrate, cuelga desde 2014 en el Capitolio en Washington. Quizá porque su intervención en la batalla de Pensacola (1781) sería a la postre decisiva para que los estadounidenses se liberaran del yugo británico.
Gálvez favoreció el paso de armas y tropas que permitió a los rebeldes forjar el proceso de independencia y los libros de historia le recuerdan como un valeroso caballero que se jugó el tipo al entrar en una bahía plagada de británicos. Una valentía de la que presumen orgullosos en Macharaviaya con un desfile con trajes del siglo XVIII, y una recreación de la decisiva batalla para liberar las entonces 13 colonias de Inglaterra.
En la recreación histórico-militar han participado la Asociación Cultural Torrijos 1831, la Orden de Granaderos y Damas de Honor de Gálvez y la Asociación Málaga Recreadora. Así se recrearon la vida de Eric Martel, fundador de la Orden, la entrada de Bernardo de Gálvez en el puerto de Nueva Orleans, además del campamento militar y la propia batalla.
En esta ocasión, la fiesta ha estado dedicada al estado de Texas para agradecer que el pasado abril, la Cámara de representantes, a propuesta del miembro de dicha cámara, Richard Peña Raymond, acordara un reconocimiento al pueblo por su celebración anual del 4 de julio y otro reconocimiento a Bernardo de Gálvez por su contribución a la independencia.
Pero el peso de esta familia en la historia del municipio va mucho más allá del militar. La aparición de los Gálvez en el siglo XVIII logró dar un enorme impulso económico a la villa, que vivió hasta el siglo XIX su época de mayor prosperidad.
Los personajes más influyentes de Málaga se acercaban en ese periodo hasta Macharaviaya para estrechar lazos con la familia, que además de crear la Real Fábrica de Naipes, reconstruyeron la iglesia de San Jacinto y fundaron el Banco Agrícola. También abastecieron de agua potable al pueblo y pavimentaron sus calles con el empedrado que aún hoy se conserva.
El municipio alcanzó tal esplendor que era conocido como «el pequeño Madrid». En esos años, Miguel Gálvez era embajador de España en San Petersburgo. Hizo llegar a Catalina 'La Grande' una muestra de los vinos que se producían en Macharaviaya. La zarina, sorprendida por su exquisitez, levantó los aranceles para su importación.
Otro de los miembros más célebres de esta familia de mecenas fue José Gálvez y Gallardo, quien recibió plenos poderes del rey Carlos III para acometer reformas en América. Allí fundó la ciudad que lleva su nombre, Galveston. A su regreso fue nombrado Marqués de Sonora y Caballero de la Orden de Carlos III.
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