No es Itálica: esta es la otra ciudad romana que hay en Andalucía en perfecto estado

Su situación estratégica, en una cota muy elevada, provocó que el lugar haya sido ocupado por el hombre desde tiempos remotos. De esta forma, se ha comprobado que durante 3.500 años, desde la Edad del Cobre hasta la Baja Edad Media, diversos pueblos pasaron por aquí y dejaron su sello con restos materiales encontrados como cerámica, vidrio, piedra o metal. Desde el siglo VI a.d.C. está rodeada de una gran muralla, reforzada con torres, proyectadas hacia el interior.

Entre las partes de esta ciudad se ha localizado un santuario, en extramuros y que fue utilizado entre los siglos III a. C. hasta el siglo II. La imagen de culto, dedicada a la diosa Caelestis, no albergaba forma humana sino que es una columna coronada por un capitel foliáceo.

La mayoría de los exvotos encontrados corresponden a mujeres embarazadas, que se supone que visitarían el santuario para rezar por fertilidad, una buena gestación y alumbramiento.

Tras la conquista romana, se fusionó el antiguo oppidum íbero con la nueva ciudad romana, y se han encontrado evidencias de construcciones durante la República romana gracias al hallazgo de cerámica campaniense de la época por todo el yacimiento.

Con las diversas excavaciones llevadas a cabo se han descubierto grandes monumentos romanos como el foro, de unos 528 metros cuadrados; tres termas romanas; un macellum (mercado), uno de los pocos ejemplos conservados en la península ibérica,; o un templo dedicado al culto imperial, entre otros.

También se conservan restos de un anfiteatro romano, una necrópolis, y la 'casa del panadero', la primera domus romana en ser excavada al completo en el parque arqueológico.

El castillo de Torreparedones de época medieval, también forma parte de este yacimiento. Existe constancia de la presencia musulmana en Torreparedones entre el Califato de Córdoba (siglo X) hasta al menos el siglo XII tal y como demuestra la cerámica y numismática hallada, así como algunas estructuras murarias. Tras la conquista cristiana a mediados del siglo XIII, comenzó a conocerse con el nombre de «Castro el Viejo» . También cabe destacar la ermita de las Vírgenes, dedicada a las mártires Alodia y Nunilo, fue construida en el siglo XVI sobre unas termas romanas.

Este yacimiento se puede visitar todos los días excepto los martes de 10.00 a 14.00 horas.