Istán, un paraíso natural entre el mar y la montaña

Una de las opciones más acertadas es visitar el municipio malagueño de Istán, que se encuentra en la falda sur de la sierra de las Nieves, pero que está muy cerca de la costa. Istán, es un paraíso natural entre el mar y la montaña, guardando además el encanto que todavía tienen los pequeños pueblos andaluces. Es una parada destacada en las sierras litorales que se extienden de manera paralela a la costa occidental malagueña, ubicándose por ejemplo sólo a 15 kilómetros de Marbella. Con lo cual se convierte en una excursión perfecta entre el mar y la montaña.

En Málaga es posible por tanto disfrutar de un delicioso baño en las templadas aguas del Mar Mediterráneo y en apenas veinte minutos buscar los parajes naturales que le dan personalidad a un rinconcito como Istán. Es esta situación privilegiada y estratégica al mismo tiempo la que a lo largo de la historia le ha dado la personalidad a esta localidad de la sierra malagueña. Pero si hay algo que caracteriza de verdad a esta localidad es sin lugar a dudas la riqueza de los ríos y los acuíferos que tiene Istán, que ha llamado la atención de todas las civilizaciones que en algunos momentos de la historia han andado por estas tierras. Por eso, en muchas ocasiones, esta localidad ha sido denominada con el sobrenombre de 'manantial de la Costa del Sol'.

El río Verde es uno de los principales responsables de la riqueza en agua que tiene el término municipal de un pueblo que también cuenta en su casco urbano con numerosas fuentes. El entorno de Istán es muy valioso en todos los sentidos, hasta el punto de que el 95% de su territorio cuenta con algún grado de protección medioambiental.

Ahora llega el momento de perdernos a través del casco urbano de esta pequeña localidad malagueña que se ha convertido en un auténtico reducto y un refugio del boom urbanístico que ha despersonalizado muchos de los municipios del entorno. En Istán hay varios hitos arquitectónicos que el visitante no debe perderse y que hacen más que interesante un paseo por el pueblo.

El lugar más valioso desde el punto de vista artístico e histórico es sin lugar a dudas la denominada como Torre Escalante, que se levantó en el siglo XV. Hasta nuestros días ha llegado el recinto abovedado, un arco de medio punto y el patio de las caballerías. Este edificio está declarado como Bien de Interés Cultural. Un casco urbano repleto de casas encaladas, con paredes llenas de macetas, fuentes y algunos miradores desde los que es posible disfrutar de todo el entorno, se convierte también en el atractivo de Istán.

Además de la visita al corazón de la localidad, otro de los puntos culminantes que no debemos de dejar pasar en nuestra visita a Istán es la ermita de San Miguel, que se sitúa aproximadamente a unos tres kilómetros del centro de Istán y que está directamente enclavada en una cueva. Allí se encuentra la imagen del patrón del municipio, San Miguel, y no nos podemos perder las vistas, donde destaca el valle del Río Verde, el embalse y al fondo el mar.

Y hablando de la importancia que ha tenido a lo largo de la historia el agua en Istán, no podemos olvidarnos de la importante red de acequias de origen morisco que existen a lo largo del término municipal de la localidad. Acequias que son auténticas obras de ingeniería, ya que se ejecutaron en su día para poder llevar el agua necesaria para el riego de los cultivos, salvando las dificultades orográficas del terreno. El denominado como Paraje de El Coto, que es un interesante paseo campestre, se convierte sin lugar a dudas en uno de los mejores lugares para poder conocer esta ingeniería aplicada al mundo de los cultivos.

Sin dejar a un lado la importancia del agua, resulta importante visitar el conjunto de la Fuente y el Lavadero del El Chorro, donde podemos contemplar preciosos caños de agua cristalina. Dentro del casco urbano son muy visitados los miradores desde los que se pueden ver el río Verde, el curso del río Molinos y los campos de Istán. Para los amantes de los entornos naturales, no pueden perderse el Castaño Santo, un excepcional árbol que tiene un perímetro de 13 metros, que cuenta con más de 800 años de antigüedad y que está a unos 30 kilómetros de Istán.

Istán es un paraíso para los amantes de deportes como el senderismo o la bicicleta, tanto de montaña como de carretera. Existen por estos lares numerosas rutas de senderismo que recorren algunos de los parajes naturales más destacados, mientras que sus carreteras son muy frecuentadas por los ciclistas que van buscando el bello paisaje y los desniveles de la sierra para desafiar a la gravedad.

Para disfrutar al máximo de todo lo que ofrece un destino como Istán, es también imprescindible degustar su gastronomía, en la que destacan platos tradicionales como la sopa de maíz, el guiso de hinojos, la berza, las migas o el gazpachuelo. También son famosos los dulces artesanales que salen de los obradores de la localidad, entre los que destacan las tortas de aceite, los rocos de vino o el hornazo con el huevo entrelazado.

Como dato curioso, cada primavera se celebra en Istán la Muestra Gastronómica y Día de la Naranja, un evento más que singular en el que los vecinos se encargan de elaborar platos típicos de la gastronomía del lugar y que se acompañan con zumo de naranja natural.

Los atractivos de Istán quedan patentes simplemente realizando una pequeña visita a este rincón malagueño en el que se harán realidad todos nuestros deseos: tendremos la montaña y el mar a nuestros pies, extraordinarios parajes naturales, buena compañía y una estupenda gastronomía artesanal.