ESCAPADAS
Doña Mencía, el placer de descubrir los tesoros de la Subbética Cordobesa
Esta pequeña y coqueta localidad, está plagada de bellos rincones y de numerosos atractivos para el visitante
Los imprescindibles de Zuheros para una escapada de fin de semana
Subbética de Córdoba, la gran fábrica de 'oro líquido' para Roma
La Vía Verde de la Subbética es un bello trazado que tiene una parada importante en Doña Mencía
A unos 77 kilómetros de Córdoba capital, cerca de localidades de enjundia como Cabra, Lucena, Aguilar de la Frontera o Zuheros, se encuentra Doña Mencía, un agradable rincón de la Subbética cordobesa ideal para disfrutar de una pequeña escapada. Doña Mencía lo tiene todo para ... los que van buscando tranquilidad, personalidad, naturaleza, historia y buena gastronomía. Un enclave que cuenta además con todos los servicios para que la experiencia de la visita se convierta en inolvidable.
Doña Mencía tiene en torno a 4.600 habitantes, en una ubicación que se sitúa a 590 metros sobre el nivel del mar, y cuenta además con el encanto que tienen los pueblos que no suelen acaparar todos los focos. Quizás otros lugares como Zuheros, Cabra o Priego de Córdoba, son más conocidos y están desde hace más tiempo presentes en los circuitos turísticos, pero Doña Mencía ha estado tradicionalmente al margen de estas grandes rutas, lo que le confiere el atractivo de lo auténtico.
Estas tierras han contado con presencia humana prácticamente desde el inicio de los tiempos y prueba de ello es el conocido como yacimiento de 'El Laderón', que se encuentra en el término municipal de Doña Mencía y en el que se halló una tumba que los especialistas atribuyeron a la cultura argárica. La ciudad tal y como la conocemos en la actualidad nace a comienzos del siglo XV, fundada por Diego Fernández de Córdoba, mariscal de Castilla. El nombre con el que ha pasado a la posteridad este rincón de la provincia de Córdoba, tiene que ver con la esposa del capitán de Fernando III Alvar Pérez de Castro, que se llamaba Doña Mencía López de Haro.
Dola Mencía cuenta con una privilegiada situación dentro de la Subbética cordobesa
Para conocer todo lo que en la actualidad Doña Mencía puede ofrecer al visitante, lo mejor será recorrer sus calles tranquilamente, sin un destino fijo, dejando que nuestros pasos nos lleven por sus calles repletas de casas encaladas, paredes adornadas con macetas que aportan colorido y casas señoriales. Un ejercicio agradable será perdernos por el dédalo de calles que dan vida al casco histórico, muchas de ellas peatonales y buscar las frases de grandes poetas de la historia de la Literatura que adornan algunas fachadas.
Atractivos
Es Doña Mencía un destino que mantiene una relación muy estrecha con el mundo de las letras, ya que fue en cierta manera dada a conocer e inmortalizada por el escritor Juan Valera, quien nació en la cercana localidad de Cabra, pero ambientó en Doña Mencía muchos de esos escritos. Por ello, con el objetivo de darle vida a estos escritos, en la actualidad existen varias rutas que llevan al visitante a recorrer los enclaves que están reflejados en la obra de Valera.
En cuanto a los monumentos e hitos fundamentales que son importantes de conocer en Doña Mencía, sin lugar a dudas el más destacado es el conjunto de Castillo, Muralla Urbana y Museo Histórico-Arqueológico. El Castillo hunde sus raíces en el siglo XV, y resulta un auténtico placer pasear por las calles que lo circundan, que sin lugar a dudas constituyen el auténtico corazón de esta localidad cordobesa. Además, los amantes de la historia, pueden rastrear las huellas de los primeros pobladores de toda esta comarca, visitando el Museo Histórico-Arqueológico, que se encuentra junto al recinto del castillo.
El Castillo de Doña Mencía comenzó a levantarse en el siglo XV
Muy cerca, se encuentra otra de las estampas más típicas y atractivas de la localidad, como es el caso de la Iglesia Vieja, que cuenta con un encanto especial, ya que comenzó a ser construida en el siglo XV, aunque un importante incendio casi la destrozó en su totalidad en el año 1932. Hoy en día, este espacio está convertido en un auditorio al aire libre, en el que tienen lugar numerosos eventos cuando llega el buen tiempo.
Vía verde
Para aquellos viajeros que van buscando un destino en el que también sea posible practicar deporte, Doña Mencía es un lugar perfecto porque se encuentra en el trazado de una de las vías verdes más conocidas de toda Andalucía, como es el caso de la 'Vía Verde de la Subbética', que discurre por la antigua línea por la que transitaba el denominado 'Tren del Aceite'. Son en torno a unos 60 kilómetros que se convierten en una auténtica delicia para recorrerlos en bicicleta, conociendo los municipios que se encuentra entre Linares y Puente Genil.
Dentro de este itinerario, la antigua estación de Doña Mencía en la que paraba el tren, se ha convertido en un restaurante equipado además con un área recreativa ideal para disfrutar del entorno y del buen tiempo. Una parada que se complementa con la existencia de una concurrida área de pernocta para autocaravanas que tiene un acceso directo desde la carretera A-318.
El área de autocaravanas se encuentra junto a la Vía Verde
Después de montar en bicicleta, seguir los pasos literarios de Juan Valera y descubrir los secretos del complejo del Castillo de Doña Mencía, no nos podemos marchar de esta localidad cordobesa sin disfrutar de otro de sus más importantes patrimonios: sus exquisitos vinos. Nos encontramos en una zona conocida por todos los amantes del vino, ya que aquí se elaboran muchos de los caldos que cuentan con la denominación de origen Montilla-Moriles. Así, para entrar en contacto con este patrimonio tenemos la opción de visitar el Museo del Vino Menciano, ubicado en el número 7 de la calle Ronda Povedano o acudir a algunas de las dos bodegas más famosas de la localidad, como son Bodegas Lama o Bodegas Luque.
Además de estos deliciosos vinos, tampoco podemos olvidar que estamos en una de las regiones del mundo donde se produce un mejor aceite, bajo la denominación de origen Baena. Sólo hay que probar por ejemplo una buena tostada de pan clásico, impregnada en algunas gotas de este aceite para poder disfrutar de su calidad.
La localidad se encuentra plagada de frases de poetas plasmadas en la fachadas
Dentro de lo que es la gastronomía propia de la zona, destacan los productos derivados de la matanza, como morcones, morcillas o chorizos. Los lugareños todavía elaboran platos de toda la vida como los tomates 'guisaos', el 'apagaillo' o las patatas en adobillo. Para terminar con buen sabor de boca nuestra visita a este tesoro de la provincia de Córdoba, es imprescindible probar los pestiños, las flores, los roscos de vino, las torticas de azúcar o las gachas de mosto. Sin olvidar los famosos 'Cuajaos', que se elaboran con almendra, huevo y harina sobre un molde de corteza de pan.
Ver comentarios