El «baby boom» de los canales infantiles

Según un informe del Observatorio Audiovisual Europeo con motivo del Día Internacional del Niño, que se celebro el pasado mes de junio, en Europa se han triplicado los canales infantiles en la última década. De los 38 que existían a finales de los años noventa se ha pasado a más de 280. En España en concreto se pueden encontrar cuatro canales para niños en abierto (Clan, Boing, Neox y Disney Channel) y una decena más en plataformas de pago. El auge llegó sobre todo en la segunda mitad de la década, cuando aterrizaron en Europa marcas como Disney, Cartoon Network, Nickelodeon y Boomerang.

Inés Ramos, la directora de programación de Disney en España y Portugal , lo achaca al auge del ocio familiar y el peso que los niños ejercen a la hora del consumo. «Los niños prescriben muchas de las decisiones de las familias. Sabemos que influyen en la compra de un coche, en qué desayuno quieren tomar, en cómo y dónde se van a disfrutar las vacaciones familiares y, por supuesto, en los juguetes que quieren para su cumpleaños o Navidad», asegura. Los niños pintan más de lo que se creía hasta hace unos años.

Pero, ¿y las cadenas públicas que no se financian con publicidad? Clan, el canal infantil de TVE, es un claro ejemplo. Para Yago Fandiño, responsable de programas infantiles de la cadena pública, la diferencia está en el target al que se dirigen: «Hay una barrera clara entre los canales públicos y privados, que son los contenidos dirigidos a preescolar. Las cadenas privadas no atienden tanto a ese público porque no deciden en las compras, pero nosotros lo cuidamos y potenciamos. Los niños ven la televisión desde muy pequeños, por lo que hay que ofrecer contenidos de calidad dirigidos a todas las edades, acompañándolos durante todo su desarrollo». Los niños menores de cuatro años no computan en las mediciones de audiencias, un factor que puede explicar la falta de canales para este nicho en abierto.

El gran logro de Clan ha sido su apuesta por el modelo multiplataforma , porque al igual que han cambiado los hábitos en cuanto a horarios y número de canales, también la forma de consumir televisión. Los chavales no se conforman con ver el capítulo de su héroe robótico preferido, sino que quieren volver a verlo tantas veces como deseen, enseñárselo a sus amigos, poder interactuar con él e incluso, convertirse en él mismo a través de una pequeña pantalla. «El planteamiento de Clan ha sido un referente para otros canales, que están adoptando nuestro modelo como ejemplo», asegura Fandiño.

Hasta los bebés tienen su propio canal. Maya Talit y su marido no podían dormir a su hijo, empeñado en ver el mismo vídeo una y otra vez. «Entonces pensamos en la falta de programas de calidad dedicados a niños de esta franja de edad y en que ni siquiera había un canal que nos proporcionara contenidos adecuados cómo y cuando queríamos verlos», cuenta Talit. Y así, de una noche de insomnio, nació BabyTV, un canal especializado en bebés de 0 a 3 años y que emite en 90 países en todo el mundo. Varios canales han seguido su estela, apoyándose en métodos pedagógicos para rellenar sus parrillas.

Canales para bebés, para niños de preescolar, para preadolescentes, especializados en chicos, con temáticas solo para chicas... la oferta entre las cadenas infantiles sigue creciendo al ritmo de los propios chavales, que en cualquier momento pueden sintonizar programación pensada para cada etapa de su niñez.