«De niño quise ser paleontólogo, investigar y descubrir fósiles»

-¿Cuénteme cómo ha sido su última semana?

-Igual de intensa que la primera. El ritmo sigue siendo el mismo, con la diferencia de que he aprendido muchísimo desde que empecé.

-¿Cansado?

-¡No lo suficiente como para no querer quedarme otro mes más!

-¿Qué tal ha ido la experiencia de ser presidente (CEO) de Adecco España durante un mes?

-A nivel de experiencia, ha sido una oportunidad única e increíble. Me ha aportado mucho. A nivel personal, no puedo estar más contento de haber compartido tantos momentos con el fantástico equipo de personas que me han ido guiando en este camino.

-¿Qué tal se ha portado con usted el actual presidente de Adecco en España, Enrique Sánchez?

-Con Enrique he desarrollado un vínculo muy estrecho, no en vano ha sido mi mentor durante este mes. Es un líder excepcional con una energía contagiosa, nunca para quieto. Yo también comparto esa hiperactividad y ha sido eso lo que nos ha salvado de no acabar agotados el uno del otro (risas).

-¿Qué ha hecho en este tiempo?

-Ha sido un mes extremadamente intenso, con mucha actividad concentrada. Las dos primeras semanas estuve dando saltos entre continentes, he asistido a reuniones, reviews, actos, presentaciones, visitas a clientes... La pregunta es: «¿Qué no he hecho en este tiempo?».

-¿Cuáles han sido los momentos más difíciles?

-Cuando uno adquiere una responsabilidad tan grande de la noche a la mañana, hay muchas cosas que aprender en poco tiempo. La presión por hacerlo todo lo mejor posible es una constante que no te puede traicionar.

-¿Y los más satisfactorios?

-Ser CEO de una gran compañía cuyo principal foco son las personas requiere estar en continuo contacto con tus colaboradores. Es ese «One to One» lo que me ha dado la oportunidad de conocer a gente muy variada e interesante durante este mes. El que Enrique haya confiado en mi abriendo las puertas de Adecco de par en par es para mi un motivo de orgullo, satisfacción y agradecimiento.

-¿Siempre quiso estudiar Ingeniería Aeronáutica o le tiró más ser futbolista o torero?

-Siempre he sido un enamorado de la ciencia, y lo sigo siendo. De pequeño tuve una época en la que quería ser paleontólogo, investigar y descubrir fósiles. Era algo tan atípico que siempre provocaba risas.

-Con el inglés, ¿al fin del mundo?

-Es fundamental tener habilidades lingüísticas completas. En este caso, el inglés es la llave en nuestros días para abrir las puertas al mundo.

-¿Cómo es un día de Héctor Recio?

-Confieso que los días de este mes han sido algo distintos a los del anterior. No obstante, si hay alguna constante en mi vida es la de no parar y mantenerme activo el mayor tiempo posible. Si no es con mis estudios es haciendo deporte, asistiendo a eventos formativos o viajando.

-¿Cuál es su agenda para esta semana?

-Esta última semana es semana de sacar conclusiones de todo lo aprendido durante este mes. Es posible que los últimos días los pase fuera de Madrid atendiendo los compromisos adquiridos como CEO por un mes.

-¿Y a qué dedica su tiempo libre?

-Me apasiona viajar y cuando tengo el suficiente tiempo lo hago. Como actividades, soy muy aficionado al deporte en general. Digamos que nado mejor de lo que monto en bici y monto en bici mejor de lo que corro; en cualquier caso, distribuyo con alegría mi tiempo entre las tres disciplinas. También invierto gran parte de mi tiempo libre en mis amigos y familiares cercanos.

-¿A qué pruebas se deberá enfrentar para convertirse en CEO (presidente) mundial de Adecco por un mes?

-Es algo desconocido aún. A nivel mundial quieren mantener la tensión hasta el último momento. Para superar la fase previa y entrar en el «pool» de 10 finalistas (sobre 34) tendré que presentar un «business case», entre otras tareas.

-¿Nervioso ante el reto?

-Más que nervioso, emocionado y expectante. Es momento de demostrar y poner en práctica todo lo aprendido. Represento a España y es mi ilusión la de dejar el pabellón alto.

-Y después de Adecco, ¿qué le puede deparar el futuro?

-Una pregunta de difícil respuesta. Si algo es seguro, es que habrá oportunidades diversas y es mi tarea el estar atento para aprovecharlas y seguir creciendo.