El Museo Sefardí muestra un bestiario medieval al aire libre

Este miércoles, la conservadora del museo, Carmen Álvarez Nogales, el director de la entidad, Santiago Palomero, y el comisario de la nueva muestra, Alfredo Mateos Paramio, dieron el pistoletazo de salida a esta nueva propuesta cultural que se mantendrá hasta diciembre y que mezcla una parte física y una virtual.

La vertiente física de la exposición la constituyen unos p aneles, instalados en el perímetro exterior de la Sinagoga del Tránsito , que reproducen a gran escala piezas de bestiarios manuscritos originales. A partir de estos carteles comienza la parte virtual de la exposición: el visitante puede capturar con su smartphone los grabados y remitirse a los documentos originales de los que proceden y a los contenidos explicativos. Se trata de una tecnología sencilla, una aplicación mediante la que el usuario no tiene porque acceder al interior del museo para disfrutar de estos documentos tan desconocidos.

La idea de aprovechar la zona exterior de la sinagoga como espacio expositivo surgió de la mano del comisario de la exposición, del director y del equipo del museo, a quienes les pareció interesante destacar estos contenidos multimedia y ofrecérselos a la gente utilizando un espacio tan transitado y desconocido como es el exterior del edificio.

La exposición parte del primer bestiario medieval , procedente de un texto escrito en Alejandría en torno al siglo II por un griego recién convertido al cristianismo que utiliza los animales del panteón egipció para ridiculizar y atacar a los judíos. El bestiario, desde su orígenes, tuvo un fuerte componente antisemita que hizo que el texto se ignorara hasta ser rescatado por monjes ingleses en el siglo XII y XIII. Los animales vuelven así a recuperar un componente contrario a los judíos que se puede ver en muchas de las imágenes de los paneles.

La muestra continúa enseñando como el elemento antisemita se va diluyendo, se resimbolizan los animales conectándolos al amor cortés y a la moral. , así lo muestra el últomo bestiario de la exposición, extraído del Códice Atlántico de Danvici .