La reforma de la Ley Electoral deja en 33 los diputados regionales

Tras la calificación por la Mesa y antes de iniciarse el trámite parlamentario, la reforma electoral se enviará al Consejo de Gobierno, que, si no se opone a la misma, volverá a las Cortes para su tramitación ordinaria y previsiblemente será aprobada en el Pleno del próximo 27 de julio. Previamente, un primer Pleno deberá tomar en consideración la Proposición de Ley y se abrirá un periodo para la presentación de enmiendas. Un segundo pleno aprobará el dictamen de la Comisión. Si hay enmienda a la totalidad serán tres las sesiones plenarias que habrán de celebrarse antes de la aprobación definitiva.

El número de escaños total se ha determinado atendiendo a criterios como la población y el territorio de cada provincia, pero no el reparto por provincias, que se sustanciará cuando se convoquen las elecciones autonómicas, sobre el mes de marzo de 2015, atendiendo a posibles fluctuaciones de la población. En principio, habrá un número fijo de escaños igual para todas las provincias, a los que se irán sumando más dependiendo de los citados factores. Las fuentes consultadas hablan de que la ley electoral será prácticamente «una copia de la Ley Electoral nacional». Asimismo, añaden que con la nueva norma «gobernará quien gane las elecciones» y destacan que «por primera vez la ley determinará de forma automática qué provincia tiene un escaño más o menos». Finalmente, quieren resaltar que «la mayoría de provincias van a decidir (al menos tres) vitando las barbaridades democráticas que cometió el PSOE, como la de dejar solo una provincia impar. Con esta ley ganará quien tenga el mayor número de escaños y votos y el resultado no dependerá del Gobierno de turno».

Esta ley electoral se tramita como consecuencia de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, que reduce a una horquilla de entre 25 a 35 el número de diputados regionales, frente al intervalo de 47 a 53 parlamentarios que recogía la anterior redacción del texto.

Asimismo, supone la segunda ley electoral que se tramita en la actual legislatura, ya que en mayo de 2012 se aprobó una norma que suponía elevar el número de parlamentarios autonómicos de los 49 actuales a 53, el máximo de diputados permitido en el anterior estatuto de autonomía.

En esta proposición de ley no se concreta el número de diputados por provincias, sino que se pospone esta decisión al momento de las elecciones, cuando se dará un número igual para todas las provincias y se sumarán otros en función de la población o el territorio. No obstante, según los cálculos que realizan en el seno del Grupo Parlamentario Popular y que ya ha apuntado ABC en anteriores informaciones, la distribución de diputados que se elegirán por provincias podría ser: Toledo, la provincia con más población, 9 escaños; Cuenca y Guadalajara, las otras dos provincias con un número impar de escaños, 5; Albacete,6 y Ciudad Real, 8.