El Senado «bendice» la reducción de diputados en las Cortes

En la sesión se rechazaron los tres vetos presentados por el PSOE, Izquierda Unida e ICV y las diez enmiendas parciales de los grupos de la oposición, de tal forma que la ley sale de la Cámara alta sin modificaciones y, por ello, no tendrá que volver al Congreso de los Diputados, sino que volverá al Parlamento autonómico donde se iniciará un nuevo trámite en forma de Proposición de Ley para la reforma de la Ley Electoral de Castilla-La Mancha, instrumento con el que se hará efectiva esa reducción a la mitad del número de escaños en una horquilla de 25-35 (ahora puede haber un máximo de 53 diputados en virtud de una reforma realizada hace un aproximadamente año, pero en la actualidad son 49 los que se sientan en el antiguo Convento de San Gil).

Una Ley Electoral que el PP ya ha dicho que quiere que «se haga por consenso» pero que todo indica que hay pocas posibilidades de que así sea, a tenor de la postura del PSOE, absolutamente contrario a que se modifique el Estatuto para reducir el número de diputados. A juicio de los socialistas, la reforma supone «la ruptura del consenso constitucional» en Castilla-La Mancha, según dijo ayer el senador y secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, quien pidió la paralización de la reforma estatutaria por ser, a su juicio, «un burdo intento de pucherazo electoral» que quiere «acabar con el pluralismo político».

El dirigente socialista insistió en que «una cosa es recortar en burocracia y otra recortar en democracia», como a su juicio ocurre en este caso. A estos argumentos, el PP responde que la reducción de diputados supondrá un ahorro cercano a los 5 millones de euros anuales y, especialmente, que responde al deseo de austeridad de los ciudadanos de Castilla-La Mancha. Según una encuesta realizada hace aproximadamente un año, el 93,4% de los castellano-manchegos apoyaría esta medida de reducción de escaños. En otros sondeos, los ciudadanos también dan su opinión sobre la supresión de sueldos a los diputados regionales: entre los votantes del PP, el 73,6%; del PSOE, 45,4%; IU, 58% y UPyD, el 75,0%. Supresión de sueldos que, por cierto, una reciente sentencia del Constitucional

Los senadores del PP Carlos Cotillas, Carmen Riolobos y Tomás Burgos defendieron este miércoles en el Pleno de la Cámara Alta una reforma que consideran «ejemplar» y que responde a los deseos del 94 % de los ciudadanos, además de encajar con la «austeridad» implantada por el actual Gobierno de Castilla-LaMancha debido «al estado en el que encontró las cuentas de la región cuando llegó al poder».

Para los senadores del PP, esta reforma no implica menos democracia y el verdadero «pucherazo» se produjo la pasada Legislatura en Castilla-La Mancha, cuando el PSOE aprobó una ley electoral a su medida, pese a lo cual perdió las elecciones. La propia Cospedal también se pronunció ayer sobre esta reforma estatuaria cuyo objetivo de reducción de diputados es «un gesto importante y ejemplar de las políticas de austeridad y gestión de lo público. Algunos lo critican, pero creo que la mayoría de los ciudadanos de Castilla-La Mancha está de acuerdo», afirmó durante un acto en Guadalajara.

Añadió que el Gobierno y los servidores públicos también deben dar «ejemplo» en los tiempos actuales en que se les están pidiendo tantos esfuerzos a la sociedad española. «No es una cuestión de dinero, los gestos también son muy importantes y es una cuestión de creérselo».

IU habló por boca del coordinador regional en Castilla-La Mancha, Daniel Martínez, quien denunció «esta maniobra inconstitucional que responde a las necesidades de la derecha política y económica de blindar el bipartidismo, sus políticas neoliberales y austericidas, que aseguran al poder económico y financiero ganar siempre las elecciones». Y como ya avanzó a ABC, anunció que la coalición recurrirá al Tribunal Constitucional la reforma para que se decrete su suspensión hasta que se produzca un falle definitivo, pues «vulnera de forma flagrante derechos fundamentales».