Rubén vs ElRubius: las dos caras del emperador de los «youtubers»

Gracias a un sentido del humor endiablado y una capacidad sobresaliente para conectar con quien le dedica tiempo, en apenas un par de años, el joven consiguió superar la barrera de los diez millones de seguidores. Desde entonces, el crecimiento fue meteórico. Ahora, en pleno 2021, roza con las yemas de los dedos los 40 millones de suscriptores en el sitio de vídeos . Es decir, casi 8 veces la población que tiene Noruega, el país en el que nació su madre y en el que pasó buena parte de su infancia, con intervalos en los que residía en España, de donde es su familia paterna.

A pesar de su popularidad, los que han conocido al espigado «youtuber» destacan que la fama no le convirtió en un divo . Que sigue rodeándose de los mismos amigos que tenía cuando comenzó a hacerse un nombre en internet. Como el «streamer» Mangel , con quien fraguó su relación jugando a videojuegos. Mucho antes de que internet se cruzase en el camino. También sostienen que la imagen vivaracha y desenfadada que proyecta ante las cámaras no es una constante. Que hay un ElRubius. Al que ahora se le menciona, sobre todo, por su reciente decisión de mudarse a Andorra. Pero también un Rubén, al que le pesan la fama y la exposición . Algo que, como él mismo ha reconocido más de una vez, no esperaba en el momento en el que lanzó su canal principal, ElRubiusOMG.

Todas las empresas consultadas por este periódico explican que el dinero que un «youtuber» como ElRubius, que se dedica a mostrar videojuegos, hablar sobre su vida y tratar cualquier tipo de contenido viral en tono cómico, es muy variable. La empresa de analítica SocialBlade cifra sus potenciales ganancias anuales, en estos momentos, en los 1.8 millones de euros. Sin embargo, el propio «youtuber» negó recientemente en un comunicado esta información. Su decisión de mudarse a Andorra , como él mismo ha explicado, no está motivada exclusivamente por el dinero, sino también para estar más cerca de sus amigos creadores de contenido, como Willyrex, que lleva varios años residiendo en el Principado. Aunque reconoce que los bajos impuestos también fueron un aliciente después de pasar una década pagando en España: «Muchas personas hablan como si yo no hubiera pagado impuestos en mi vida, como si no hubiera hecho nada por mi país (mejor dicho, por uno de mis dos países), como si fuera un criminal. Llevo estos 10 años de 'youtuber' pagando casi la mitad de lo que he ganado en impuestos. 10 años. Y estoy muy contento de haberlos pagado», se defiende.

Enric Gabarró, quien a mediados de la década pasada trabajó con el creador en campañas publicitarias para firmas como Kit Kat o Volkswagen como responsable de grandes cuentas de Divimove , explica a este diario que «desde el principio se le veía como a un chico muy auténtico e introvertido. En ese momento ya era muy consciente de las decisiones que tomaba y la repercusión que podían tener. Era muy cuidadoso con todo. Además, estaba muy entregado a sus seguidores. Igual que ahora. Eso es algo que le honra mucho».

Esta agencia de representación, nacida en 2012, llevó los asuntos de Rubén desde 2014 hasta 2016 y, en estos momentos, sigue cuidando de talentos nacionales como Dulceida o el catalán AuronPlay , que, con 27 millones de seguidores, es el tercer creador español más popular en YouTube. Solo superado por el propio ElRubius y Vegetta777. Aunque a principios de la década pasada la plataforma no se entendía como una opción de negocio, no pasó demasiado tiempo antes de que el enorme fenómeno de los influencers comenzase a despuntar. Y por tanto, que el sitio propiedad de Google, que ahora registra 1.000 millones de horas reproducidas al día, cuando en 2012 eran 4.000 millones al mes, llamase la atención. Así comenzaron a surgir compañías dedicadas, en concreto, a gestionar las carreras de los talentos.

Desde Divimove explican a ABC que la empresa vio en ElRubius un gran potencial . Que su capacidad de generar comunidad no es algo que muchos creadores de contenido en España puedan igualar. «Tiene una forma de comunicarse y unos códigos muy novedosos. Fue un pionero. No es el único, pero encarna muy bien esa forma gamberra de expresarse que ha definido a tantos creadores. También era una persona que daba confianza a las marcas», explica a este diario Ainhoa Muguerza, actual jefa de relaciones públicas de la firma.

Rubén dejó la compañía en 2016, algo que en Divimove se entendió como «parte del juego». Desde entonces, forma parte de la cartera de Vizz . La agencia, que se ha negado de forma tajante a ofrecer a este periódico cualquier información sobre su representado, fue fundada en 2007. Actualmente representa a tres de los «youtubers» españoles más importantes: el propio ElRubius, Vegetta 777 y Willyrex. La agencia también ofrece sus servicios a otros creadores pujantes, como Ibai Llanos, Paula Gonu, Lolito o Mangel, que es uno de los mejores amigos que tiene Rubén.

La misión de Vizz, como la de todas las firmas que se dedican a la promoción de «influencers», es liberarlos de todo el peso para que se centren exclusivamente en la creación . Y también es bastante habitual que aquellos «youtubers» con los que un creador de éxito tiene relación acaben bajo el mismo paraguas. «Nosotros fichamos un talento y, entonces, ese talento acaba recomendando a sus amigos. Es habitual que acabemos teniendo muchísimos amigos de uno en concreto o muchísimos youtubers que se relacionan entre ellos. No es raro que Webedia fiche a ElRubius y se lleve a sus cuatro o cinco amigos a esa agencia», apunta a ABC Patricia González, directora de marketing de la compañía de representación 2btube , fundada en 2014 y que cuenta con representados que superan holgadamente el millón de suscriptores, como Makiman , que genera un contenido similar al de ElRubius.

Empezó en la plataforma a principios de 2013 y, en estos momentos, cuenta con casi 14 millones de seguidores . «En la primera generación de youtubers nadie sabía lo que iba a suponer la plataforma. Les pilló completamente de nuevas», completa González que hace hincapié en la «importancia de saber llevar el canal a lo largo de la vida para conseguir adaptarlo a los tiempos que corren y, de este modo, estar en línea con los gustos de tus espectadores».

Entre los servicios que ofrecen las agencias de representación figuran, entre otras cosas, ayuda técnica, gestión de la monetización del contenido que se sube a YouTube y el cierre de acuerdos publicitarios. Todas las firmas señalan que, en la enorme mayoría de los casos, el dinero que dan los vídeos que se publican en la plataforma no traen un beneficio suficiente para poder dedicarse en exclusiva a ello. Para que eso ocurriese, un canal tendría que contabilizar «millones y millones de visitas en su contenido cada mes».

Los grandes ingresos se encuentran en los acuerdos para campañas publicitarias. Asimismo, empresas consultadas por este diario afirman que un perfil como el de ElRubius, que amasa millones de seguidores en otros sitios, como Twitch o Instagram, puede ganar «mucho más» de 100.000 euros por un anuncio. Sin embargo, esto no implica que todo el dinero sea para el creador . La agencia, que se encarga de gestionar estos acuerdos, también se queda un porcentaje que varía en función de la firma a la que nos estemos refiriendo y del proyecto concreto.

Sea como fuere, el trabajo de las agencias permite que acuerdos publicitarios, como el reciente anuncio en el que Sony utilizó la imagen de ElRubius para promocionar su consola PlayStation 5, lleguen a buen puerto. Sin embargo, el que el creador te devuelva la sonrisa desde la pantalla, y ponga cara de asombro mientras descubre las bondades del sistema , no implica que sea igual cuando se apagan las cámaras.

«Era más introvertido de lo normal. A la hora de relacionarte con él te das cuenta de que es un chico al que no le gusta estar bajo los focos. Cuando enciende las cámaras es completamente distinto. Me acuerdo de una situación en la que estábamos grabando en medio de la calle y veía los cortes. Se empezaba a grabar y se convertía en el tío más extrovertido del mundo. Se apagaba todo y se retraía completamente», comenta el exrepresentante de cuentas de Divimove.

«Recuerdo que un día un grupo de chicas lo reconoció por la calle y se pusieron a llorar. Vimos que llegaba una marabunta de gente y tuvimos que cortar el rodaje e irnos a otro sitio. Él en esas situaciones siempre se mostraba simpático. Pero no le resultaba fácil», explica Gabarró, que a día de hoy dirige Picker , empresa dedicada a recomendar productos. Esa enorme exposición, y la completa evaporación de la privacidad, fue uno de los motivos que llevaron a ElRubius a dejar YouTube durante unos meses en 2018.

En su vídeo de despedida, el creador afirmaba que cada vez le podía más la presión y sentía más ansiedad. Algo que, como explica a este diario el psicólogo Javier Álvarez, es bastante habitual entre los «influencers»: «El principal riesgo de la sobreexposición para un youtuber es la ansiedad. Cuando he trabajado con alguno de ellos, siempre me explican que su trabajo es como vivir en una montaña rusa. Están todo el día viendo resultados del contenido. La ansiedad mantenida en el tiempo puede provocar bajo estado de ánimo y, en algunos casos, incluso depresión».

ElRubius no puede tener una vida normal . Como él ha comentado en varias ocasiones, ha tenido que dedicar muchos esfuerzos a proteger las migajas de su anonimato. Durante los últimos años ha tenido que cambiar de domicilio en cinco ocasiones y se ha acostumbrado a pasar la mayor parte del tiempo encerrado. También cuidándose de no cometer errores. «Él es un chico muy normal. Pero siempre está preocupado por no meter la pata y evitar las críticas», explica a este periódico Juan Torres, guionista del cómic y la serie de televisión « Virtual Hero », ambos protagonizados por ElRubius.

Por su parte, el youtuber Aritz Acevedo, más conocido en internet como Moyorz87, conoció al influencer en un evento de videojuegos celebrado en Nueva York en 2018. Señala a este diario que lo que un creador de éxito moderado puede hacer es un imposible para Rubén: «Cuando tienes tanto público como él hay que tener cuidado. La gente te ve y se te puede echar encima. Cuando vas a una convención es normal que te pares en los stands a ver cosas. Para él eso es imposible».