Hall Street: el «Airbnb» de los hoteles

Los precios no son fijos, por tanto, se pueden negociar. Si ves una oferta de un hotel que te gusta, siempre puedes hacer ofrecerles un precio más bajo y ver si están dispuestos a aceptar, así se puede conseguir un precio más bajo. En caso de querer vender, ya seas un hotel o un particular, permite que la vendas completa o «cama a cama». Las personas que viajan solas pueden compartir las camas que no utilizan y así una habitación doble, que suele tener el mismo precio de una individual, te puede salir por la mitad de precio. Las valoraciones que los usuarios reciben en la plataforma sirven para poder estar más seguro al compartir una habitación con un desconocido.

Ouro señala que Hall Street resulta «muy interesante», sobre todo, para grandes eventos, cuando hay que optimizar las plazas hoteleras de una ciudad. E n realidad, estamos ante un producto de la situación que han creado productos como Airbnb en el mercado hotelero. Con ellos, los hoteles han visto cómo sus reservas han bajado en determinados segmentos de consumo, sobre todo, entre los más jóvenes. De esta manera, mediante este servicio la reserva de un hotel es «mucho más social, atractiva y divertida» precisamente para ese segmento.

El portal tiene presencia global en más de 90 países y cuenta con más de 200.000 usuarios, entre hoteles y agencias que ofrecen y compran reservas de hoteles en la plataforma. El usuario puede llegar a encontrar en las reventas, dentro de Hall Street , «chollos» con un ahorro de hasta el 70% sobre la tarifa habitual del hotel.