Probamos los nuevos OPPO Reno6: dos 'smartphones' que no se parecen en nada

Empezando por el diseño, ambos terminales no se parecen en absolutamente nada. El Reno6 tiene un aspecto cuadrado, que recuerda mucho a los antiguos iPhone. Una especie de diseño retro, que lamentablemente puede llegar a cansar, y que a veces se puede sentir algo raro en la mano, por su relación entre peso y tamaño. Durante el tiempo de prueba, siempre teníamos la sensación de que se podía caer en cualquier momento. El Reno6 Pro, tiene un diseño menos llamativo, más tradicional , con bordes curvados y un acabado en OPPO Glow que nos ha encantado, este cambia de color según la luz y no se marcan las huellas en absoluto a pesar del acabado en cristal.

En cuanto la pantalla no hay diferencias notables entre los dos modelos, sólo en el tamaño y en el brillo. El panel AMOLED es de 6,44 pulgadas en el Reno6 y 6,55 en el Pro, una diferencia que, en términos generales, no se aprecia. Lo que sí se nota es el brillo, que en la pantalla del Pro es bastante más alto, y en las ocasiones en las que hace falta, como en exteriores a pleno sol, se puede apreciar la diferencia.

En cuanto a las cámaras, no tiene nada que ver un móvil con otro . El Reno6 lleva tres cámaras, un gran angular de 8 megapíxeles, un macro de dos megapíxeles y un principal de 64 con apertura f/1.7. Los resultados son adecuados, es decir, en situaciones de buena luz el resultado es bueno, tanto con el gran angular como en el macro, pero que empalidecen ante la cámara del Pro que se mueve en una calidad y definición de otro nivel, sobre todo en el tratamiento del color y la definición de imagen.

La cámara del Pro es excepcional, mientras que la del Reno 6, es simplemente, normal. Y eso se debe a sus cuatro lentes, al teleobjetivo 5x híbrido de 13 megapíxeles, el gran angular de 16 megapíxeles, el macro de 2 y un principal de 50 megapíxeles. Pero la principal diferencia del Reno6 con el Pro en la fotografía está en el sensor, un IMX766 1/1,56 OIS+EIS codiseñado con Sony, que luce el modelo más puntero, con el que logra una iluminación y un trato de los colores muy bien conseguidos, también en la fotografía nocturna.

El teleobjetivo, es funcional, pero hay que recordar que es híbrido, y pierde mucha calidad según vamos haciendo zoom, a partir del 4x se empieza a notar la predominancia del digital, no se puede comparar con terminales con Zoom óptico.

Ambos teléfonos llevan una gran cantidad inteligencia artificial para reconocer escenas, selección automática de HDR, y un modo noche nocturno. Pero los resultados no son comparables, las cámaras del Pro son de alta gama, mientras que las del Reno 6, son justas para la gama media.

Los procesadores también son diferentes , pero ahí las diferencias se aprecian más sobre papel, y probablemente se puedan ver a largo plazo, con el uso del teléfono. El MTK Dimensity 900 del Reno 6, no deja de ser un procesador de capacidad media, que en Geekbench nos ha dado una puntación de 2147, mientras que el Snapdragon 870 es de 3285, una diferencia muy notoria. Lo que implica que el modelo Pro es notablemente más rápido que el nomal. Este, además, cuenta con una memoria de 12 GB y 256 GB, mientras que el Reno 6 'a secas' se queda en 8 GB de RAM y 128 gigas de disco duro.

Ambos modelos tienen una autonomía similar, que se mueve en torno a las 30 horas, y carga súper rápida de 65W SuperVOOC 2.0.

Hay 200 euros de diferencia entre el OPPO Reno 6 y el OPPO Reno 6Pro, pero que sitúan a uno en la gama media, y al segundo en la alta. La diferencia entre ambos es abismal en todas sus características, sobre todo cámaras y procesador. Mientras que el Reno 6Pro tiene un buen precio y características para la gama alta, el Reno6 compite en la gama media con muchos otros terminales que se presentan como buenas alternativas. Si queremos un móvil que sobresalga en todos los aspectos y tenemos el presupuesto, el OPPO Reno 6Pro es nuestro móvil.