Las seis cosas que jamás debes compartir por WhatsApp o redes sociales

El correo electrónico y el número de teléfono pueden ser necesarios para abrir cuentas en redes sociales. Sin embargo, lo ideal es intentar compartirlos exclusivamente con aquellos servicios que sean necesarios y, sobre todo, de confianza. Si vamos entregándolos alegremente por internet, o haciéndolos públicos en sitios como Facebook para que cualquier internauta los vea, corremos el riesgo de que acaben en malas manos. Cabe recordar que, en este momento, los ataques de tipo 'phishing ', en los que los cibercriminales se hacen pasar por un tercero para engañar a la víctima y robar sus datos personales, están más extendidos que nunca. Y, precisamente, el correo electrónico y el teléfono móvil, ya sea a través de mensajes SMS, WhatsApp o llamadas telefónicas , son las dos puertas que los cibercriminales suelen utilizar más habitualmente.

Recientemente empresas de ciberseguridad ESET alertaba sobre una campaña maliciosa que está teniendo especial incidencia en España y permite que nos hagamos una idea sobre el interés que despierta esta información en un delincuente informático. Según un reciente estudio los criminales que están detrás ya han conseguido robar los números de teléfono de uno de cada cuatro españoles que puede emplear para . Para conseguirlo, se hacen pasar a través de SMS por servicios de mensajería, como FedEx o Correos, con el fin de 'hackear' el dispositivo de la víctima mediante el empleo de un virus troyano y robar información ; entre ella la libreta de contactos. ««Es una campaña muy bien orquestada y está dirigida en concreto a España, aunque ya está llegando a otros sitios, como Polonia. Los troyanos bancarios en nuestro país funcionan muy bien», explica a ABC Josep Albors, jefe de investigación y concienciación de ESET . El experto destaca que en España muchas personas «todavía no están concienciadas de que estas amenazas existen», por lo que se convierten en un gran objetivo para los grupos de cibercriminales que las emplean.

La ubicación activada en redes sociales permite a la empresa detrás, como es el caso de Facebook, contar con más información sobre nosotros para mostrar publicidad dirigida. Más allá de esto, que un usuario muestre, por ejemplo, que está fuera de casa a unas horas concretas permite que un criminal pueda hacerse una idea sobre su cotidianidad. Y eso es un riesgo. «El que compartas la ubicación habitual supone un riesgo, porque permite localizarte con cierta facilidad. Si un tercero sabe si estas en casa, en el trabajo, o en cualquier otro sitio cuenta con información más que suficiente para actuar en tu contra», explica a ABC Eusebio Nieva, director de la empresa de ciberseguridad Check Point .

Desde Incibe también se recomienda mantener en secreto la ubicación en la que vivimos . Y eso pasa por no compartir fotografías que puedan permitir que un criminal nos ubique. A este respecto, la empresa Nord VPN recuerda que en 2019, en Japón, un usuario consiguió localizar el edificio exacto en el que vivía una chica a la que acosaba simplemente analizando sus selfies. «El caso demuestra el gran problema que los usuarios de redes sociales enfrentan estos días: el acoso digital puede derivar en maltrato físico», dice en un comunicado remitido a este diario Ruby González, encargada de comunicaciones en la empresa tecnológica NordVPN: «Las visualizaciones y reacciones al contenido de tus redes sociales te hacen sentir bien, pero el fondo de tus imágenes y videos también proporciona información para los criminales que rondan por la red».

Compartir fotos de menores en redes sociales es un práctica extendida. Pero eso no implica que sea lo más aconsejable. «No sabemos dónde pueden acabar ni quien puede tener acceso a ellas. Lo mejor es taparle la cara (al niño) de algún modo», recomiendan desde Incibe. Asimismo, es aconsejable hacer privadas las cuentas de redes sociales, de forma que podamos controlar que lo usuarios que tienen acceso a nuestra información son de confianza.

Los expertos en ciberseguridad también llevan tiempo alertando sobre los riesgos de c ompartir por redes fotos comprometedoras e íntimas . El Instituto Nacional de Ciberseguridad destaca que pueden suponer «una gran amenaza para nuestra seguridad y tener consecuencias muy graves». Como la 'sextorsión'. Recientemente la empresa de ciberseguridad Avast compartió un informe en el que aleraba de que entre el 12 de enero y el 12 de febrero se detectaron en España 36.759 ataques de este tipo, en los que los criminales amenazan al internauta con hacer público contenido íntimo si no se realiza un pago.

Servicios de mensajería, como Telegram , ya permiten al usuario el envío de imágenes que se autodestruyen en un plazo estipulado . Además, la aplicación avisa en caso de que un usuario realice un pantallazo. WhatsApp , por su parte, está trabajando actualmente en una nueva función que permitirá que un internauta programe la eliminación de un archivo en el momento en el que el receptor lo abra.

Todos hemos compartido datos sobre alguna conversación que hemos mantenido con un tercero. Ya sea a través de redes sociales, aplicaciones de mensajería o cara a cara. Sin embargo, eso no implica que cualquier cosa dicha, o compartida, pueda hacerse pública . «Cuando somos parte de la conversación a través de redes sociales podemos compartir lo que se ha dicho. Ahora, no podemos hacerlo si hay elementos que afectan a la intimidad de la otra persona», explica a este diario el abogado especializado en asuntos digitales Samuel Parra. Ese sería el caso, por ejemplo, según explica el experto, de información bancaria o imágenes íntimas .

«Las conversaciones privadas no son algo que podamos compartir en internet, especialmente si contienen datos personales o información que podría considerarse como revelación de secretos y la otra persona preferiría no difundir», destacan desde Incibe.

Hacer visible en internet información como el DNI, contrato de trabajo, carné de conducir o información bancaria le da a un ciberdelincuente herramientas para poder suplantar al internauta . Cabe recordar que las estafas de 'phishing' suelen estar destinadas a recopilar datos de este tipo. Además, si un ciberdelincuente tiene acceso a ellos puede utilizarlos para realizar ataques más personalizados contra la víctima y sus contactos.

Las redes sociales están concebidas como espacios para que el usuario se exprese en libertad. Sin embargo, si, como hemos visto, no debemos utilizarlas para compartir información íntima de terceros, desde Incibe también se recomienda tener cuidad con las quejas que realizamos y nuestra forma de expresarnos : «Un comentario subido de tono en la red puede llegar a oídos de personas que pueden sentirse ofendidas o incluso atacadas, y que podrían no tomarse demasiado bien nuestros comentarios».