El periodista John Berman se llevó un buen susto durante la grabación de un reportaje para la cadena ABC en el que tenía que nadar entre tiburones ballena, que miden nada más y nada menos que 12 metros y se alimentan principalmente de planctón.
«¿ ... Crees que me puede pasar algo?», pregunta Berman a la instructora de buceo antes de sumergirse. «Nada, te van a ignorar completamente, te lo prometo», contesta ella. Y el periodista bromea: «No tengo buen sabor».
Y sus sospechas se confirman. Una vez en el agua, el «animalito» comienza a perseguirlo con la boca abierta como si tuviera la intención de engullirlo, aunque finalmente pasa de largo.
Ya en la superficie el reportero asegura que son animales «muy rápidos, pero muy tranquilos» y asegura que no se dio cuenta de que el tiburón ballena nadaba detrás de él.
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