Los patinetes eléctricos más exclusivos que puedes pedir a los Reyes Magos

Esta selección variada de patinetes eléctricos, todos de alta gama, aunque uno más exclusivos que otros, incluye ediciones especiales poco conocidas, rarezas únicas, modelos solo aptos para utilizar en circuitos cerrados y hasta diseñados de algunas de las marcas de coches más potentes del mundo, que hace tiempo entraron en el mercado de los patinetes, como te demostramos en este otro reportaje sobre scooters plegables de lujo.

No faltan, además opciones realistas: disponibles en serio en el mercado que ofrecen un rendimiento sobresaliente y tienen precios costosos pero accesibles para bastantes bolsillos.

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Pure x McLaren

McLaren es una de las últimas casas de coches de lujo que se ha animado con los patinetes eléctricos de lujo, siguiendo los pasos de otras firmas como Bugatti.

El sello de Woking (Reino Unido) no ha dado el paso en solitario, sino que lo ha hecho asociada a Pure Electric, una de las firmas más reconocidas del mercado de los scooters eléctricos.

El Pure x McLaren, resultado de esta colaboración, es un patinete acabado en dos colores, entre los que no falta, como no podía ser de otro modo, el naranja papaya, seña de identidad de los británicos. También está a la venta en negro.

El patinete en cuestión sorprende por su precio, que no es altísimo teniendo en cuenta que está McLaren de por medio: cuesta 899 libras esterlinas, no llega a 1.100 euros.

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Lightfoot

Justo a tiempo para la Navidad, para la carta de los Reyes Magos, puedes encargar uno de los patinetes de lujo más extraños jamás diseñados. Se llama Lightfoot e incluye dos paneles solares laterales que se abren, ofreciendo un espacio interior capaz de soportar hasta 15 kilos de peso.

Por ejemplo, puedes meter en ella la compra, que es algo que da mucha rabia hacer cuando vas en patinete al súper para no sacar el coche, porque no puedes cargarte en exceso, o una maleta de tamaño reducido. También puedes guardar el casco y otros enseres personales, como una mochila o maletín, si lo usas para desplazarte al trabajo.

Sus fabricantes, Rolling Sunshine, aseguran que la zona de almacenamiento es resistente a la intemperie, y además está cerrada con llave. Además, para que las cuestas no sean un problema, tiene dos motores lo suficientemente potentes para subirlas.

Su precio es de 5.000 dólares, 4.806 euros.

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Smartgyro Raptor

Una de las novedades del año más potente entre los patinetes eléctricos de alta gama es el Smartgyro Raptos, un modelo que cuenta con dos motores de 1300 W y 52V de potencia máxima cada uno, lo que hace un total de 2600 W de potencia, mucho para un vehículo de este tipo.

Su batería de litio de 18.000 mAh ofrece una carga de largo recorrido, hasta 70 kilómetros de autonomía, por lo que es un patinete versátil, capaz de cubrir distintas necesidades. Todas las urbanas entre ellas. El patinete también cuenta con un sistema de frenada regenerativa, almacenando en la batería una parte de la energía producida en dicha frenada, una tecnología innovadora que alarga más si cabe la vida de la batería.

Además, su doble suspensión y las ruedas neumáticas de 10 pulgadas garantizan algo de lo que carecen muchos scooters eléctricos, confort y sensación de seguridad ante las imperfecciones del piso.

Y, por si fuera poco, incluye una pantalla a color de gran tamaño con una notable variedad de funciones, y una toma USB integrada en el display. Precio: 1.500 euros aproximadamente.

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Niu KQi Air X de fibra de carbono

Uno de los grandes inconvenientes de los patinetes eléctricos es su peso: son poco manejables. Pero eso cambia si tienes la suerte de disponer en casa del nuevo modelo de la marca Niu, que al estar fabricado el 100% de su cuadro aligera muchísimo su peso. De hecho, es 200 gramos más liviano que su antecesor, el Niu KQi Air.

A la ligereza le suma una potencia interesante, que cubre de sobra lo que puede ofrecer, por las limitaciones de velocidad vigentes para estos vehículos (25 km/h), ya que su motor ofrece 700 W de potencia. No en vano, su velocidad punta en mercados no limitados es superior a los 30 km/h.

Además, es altamente funcional también a la hora de plegarlo, ya que se hace con una pieza trasera distinta al clásico cierre del timbre como enganche y otras soluciones de distintas marcas.

En cuanto a la autonomía, según el fabricante ronda los 50 km, pero en modo sport de conducción se reducirán de forma significativa. Serán, en cualquier caso, más que suficientes para trayectos urbanos. Y a nivel de seguridad en la conducción, da tranquilidad que el patinete incorpore freno de disco tanto en la rueda delantera como en la trasera. Precio: alrededor de 1.500 euros.

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Niu KQi Air X de fibra de carbono

Cerramos la lista con un scooter eléctrico especial porque en nuestro país no se puede utilizar en la vía pública por sus características. Eso no quita para que no sea un regalazo si el regalado es una persona amante de las dos ruedas que tenga la posibilidad de pisar pistas de carreras o tenga un espacio amplio que sea propiedad privada.

El patinete en cuestión es una pasada. Prueba de ello son su autonomía, hasta 90 km, y sobre todo, su velocidad punta, hasta 70 km/h (de ahí que su uso esté restringido por normativa). El scooter es capaz de acelerar de 0 a 48 km/h en menos de cuatro segundos.

Además, para garantizar el confort y la seguridad mínima necesarias para un vehículo como este que ofrece tal rendimiento, incluye detalles como los neumáticos sin cámara autoregenerables de 11 pulgadas o los frenos de disco delantero y trasero.

No falta tampoco la mejor tecnología de información para un patinete eléctrico, con una pantalla digital OLED transparente. Precio: 2.800 euros aproximadamente.