A la venta la "casa encantada" por 202 millones de euros, la mansión más cara de EE.UU

Comenzó a construirse en 1938 , en plena época dorada del cine mientras se mudaban a esta región de California estrellas de la talla de Greta Garbo, Joan Crawford, Clark Gable, Katherine Hepburn, Spencer Tracy .

La mansión está en Bel Air, el distrito que reune a las personalidades y celebridades más glamurosas del panorama cultural. La mandó construir el magnate hotelero Conrad Hilton en su finca de 32.374 m2. La mansión, de 3.700 m2 es la única vivienda de la concurida zona residencial que no tiene vecinos . Esta cualidad es una de las tantas que encarece su valor en el mercado.

La casa es de estilo georgiano , como muchas de las construcciones de finales de los años 30, y su ubicación está en pleno triángulo del lujo Californiano, a escasos 10 minutos en coche de Beberly Hills. La alzó James E. Dolena, un arquitecto de gran renombre en la época, que estudió todos los detalles para poner en valor su obra.

Además de estar en una localización de lujo que facilita el trayecto con sus poderosas ciudades vecinas, está aislada por un bosque y se alza sobre una superficie lo suficientemente alta como para que permita ver el mar desde sus 60 habitaciones .

TH Robsjohn-Gibbings, emperador del interiorismo, fabricó los muebles de lujo a medida para la mansión y se involucró de tal modo en su proyecto que éste pasó a la histora por la genialidad arquitectónica que proyectó en esta propiedad. Diseñó cada pieza del mobiliario y lo armonizó con el espíritu que consideraba que La Casa Encantada debiera tener.

Después de 80 años la mansión necesitaba una restauración que respetase su esencia original . Antes de que el inmueble volviera a salir al mercado un equipo de 250 personas la restauraron por completo cada una de las estancias durante dos años .

Los futuros propietarios podrán disfrutar de la finca con piscina, invernadero, jardines de rosas cancha de tenis y de baloncesto como de sus exclusivos espacios interiores: tiene salones para diferentes eventos, una sala de cine, un bar, biblioteca y zona de juegos. Los invitados disfrutarán de la privacidad que necesitan en la casa anexa preparada especialmente para ellos.

La historia, el lujo, la tradición y la modernidad se resumen en esta mansión, apta para ciudadanos exigentes que busquen un reducto de paz y armonía con el valor de una obra de arte.