Los relojes de políticos y personalidades ilustres

Si nos remontamos a siglos pasados, para conocer la identidad de los clientes más famosos de las marcas de relojes basta con revisar los archivos para conocer sus nombres.

En los de la casa Patek Philippe figuran nombres tan relevantes como Victoria de Inglaterra , Albert Einstein, Marie Curie, Tolstoi o Richard Warner. En la de Breguet , ocurre otro tanto: María Antonieta de Francia, Luis XVI, la emperatriz Josefina, Napoleón, Winston Churchill, Alejandro Dumas o Víctor Hugo.

Lo mismo ocurre con Vacheron Constantin , que contaba -y cuenta- con un club muy selecto. No es de extrañar dado que poseen el servicio de personalización más completo del mundo . El marajá de Patiala, Louis Napoleón, los reyes Fouad, Víctor Manuel, Pedro I de Serbia, Balduino, el duque de Windsor Eduardo VIII, el banquero Herny Graves o la reina Federica de Grecia figuran en el Libro de Oro de la boutique de Ginebra como clientes ilustres. También se tiene constancia de que Isabel de Inglaterra tiene un reloj Vacheron Constantin. Lo recibió como regalo de la Confederación Suiza por su boda en 1947 con el teniente Philippe Mountbatten.

También conocido como el reloj de los presidentes, el modelo Atmos plasma el sueño eterno del movimiento perpetuo. Desde la década de 1950 y hasta el año 1978, este reloj de la manufactura Jaeger-LeCoultre fue el regalo oficial de la Confederación Suiza a los invitados más ilustres, como Winston Churchill, John Fitzgerald Kenedy , Jean-Paul II, Felipe VI o Isabel II de Inglaterra, quien además eligió para el día de su coronación (1953) un reloj discreto y elegante, de hecho el reloj de pulsera más pequeño del mundo, accionado por el calibre 101 de la misma manufactura.

Pero si hay una marca que haya nacido por y para fabricar relojes para presidentes esa es Vulcain . Muy pocos objetos pueden hacer alarde de haber acompañado a los grandes hombres de la historia. Uno de ellos es el reloj 50s Presidents’ Watch de Vulcain . Utilizado por Eisenhower, Trumann, Nixon, Johnson y Obama , está equipado con el calibre Vulcain Cricket V-11, movimiento despertador de cuerda manual. Cuentan que Trump ha seguido con la tradición y ha recibido el famoso reloj Vulcain.

Vulcain le dio un Vulcain Anniversary Heart Automatic de acero al presidente Obama para marcar su toma de protesta. Alrededor del borde de la caja está grabado: «Presidente de los Estados Unidos el 4 de noviembre de 2008 / Barack Obama». En el movimiento se graba «Barack Obama / 4 de noviembre 2008» marcando la fecha de su elección.

Cartier es otro gran nombre de la relojería y entre sus clientes se encuentran los grandes nombres de cada época. Las familias reales de Yugoslavia y Serbia, los Rothschild , la aristocracia londinense … y, al otro lado del Atlántico, magnates de la industria y las finanzas- los Hutton, Crocker, Hearts, etc- y los famosos del Séptimo Arte como Fred Astaire, Jean Harlow, Gary Cooper, Brigitte Bardot, Stewart Granger, Alain Delon, Clark Gable, Ingrid Bergman o Yves Montand.

Como anécdota cabe destacar que Rodolfo Valentino le pidió al director George Fitzmaurice lucir en las últimas tomas de la película «El hijo del jeque» su apreciado Tank , uno de los relojes más famosos de la marca parisina.

A Jackie Kennedy también le encantaban los Cartier. Además por su cuarto aniversario de boda le regaló a John F. Kennedy un Cartier, en cuyo fondo grabó las iniciales del presidente JFK y la fecha del enlace. Al parecer, el presidente tenía igualmente un Rolex Day-Date, regalo de Marilyn Monroe .

Pero cuando Omega llegó a la Luna en 1969 , John F. Kennedy tomó posesión de su cargo de presidente de EE.UU con un reloj Omega en su muñeca, regalo de su amigo Grant.

Uno de los relojes Rolex más mítico y codiciado es el Cosmograph Daytona Paul Newman (subastado hace unos meses por 15.228.095 euros), un regalo de su esposa Joanne Woodward quien grabó en el fondo la inscripción «Drive slowly, Joanne». Presidentes norteamericanos como Dwight D. Eisenhower, Lyndon Baines Johnson y Ronald Reagan también tenían sus respectivos Rolex.

El éxito de Hublot fue meteórico y una de las razones fue que conquistó el gusto de las cabezas coronadas de toda Europa. El primer reloj de oro con correa de caucho fue conocido como «el reloj de los reyes» , pero también lo lucían políticos, empresarios, actores… Al rey Juan Carlos I se le vio en infinidad de ocasiones con su Hublot, al igual a Mario Conde, quien llegó a crear tendencia, haciendo que muchos de los diputados del PP lo lucieran igualmente.