MODA
El momento perfecto para cambiar a los zapatos de verano
Llega el calor y los pies piden nuevos acompañantes con los que soportar mejor las altas temperaturas
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónCuándo afrontar el cambio de armario para recibir por fin al ansiado buen tiempo. He aquí una de las cuestiones que cambio de temporada tras cambio de temporada nos preguntamos. Y la duda nunca desaparece por una cuestión lógica: el clima siempre tiene guardadas ... sorpresas.
Ahora que el calendario avanza imparable hacia el verano, las sorpresas son cada vez más esporádicas, de modo que desde la segunda quincena de abril en adelante ya parece un buen momento para abordar esta tarea que siempre da pereza pero que al mismo tiempo, al menos cuando toca hacerla en primavera, deja un regusto dulce porque significa que la temporada estival está a la vuelta de la esquina.
Con la ropa, la ventaja de un armario masculino bien armado es que siempre hay recursos para dar un paso atrás y poder diseñar un look de entretiempo improvisado si el tiempo se estropea momentáneamente. La gran dificultad en este sentido radica en el calzado, ya que la diferencia entre los zapatos y deportivas de otoño invierno con lo que nuestros pies necesitan cuando el calor aparece no tiene nada que ver.
La perfecta transición de las botas a las sandalias
Siempre puedes optar por dejar a mano al menos dos pares de zapatillas y de zapatos tipo oxford, o alguno en esta línea, y guardar ya hasta el año que viene (siempre y cuando sigan en buenas condiciones) tus botas de montaña , botines tipo chelsea y demás calzado invernal. Y poco a poco, a partir de aquí, dar paso a mocasines, deportivas de lona o de tela, y náuticos si son de tu gusto. Habrá quien piense que te “has venido arriba” por anticipar tanto el verano, pero hay lugares de nuestro país donde el entretiempo apenas existe.
Por ello, si resides en uno de ellos (Madrid, por ejemplo), no es ninguna locura abordar ya el cambio a los zapatos de verano, sobre todo si hablamos de mocasines , que son seguramente el tipo de zapato que mejor se adapta a las circunstancias y el más versátil (apto para contextos de ocio y trabajo) para completar la transición hasta las sandalias, alpargatas y abarcas.
Para estas últimas, lógicamente, tocará esperar un poquito más. Por lo menos, unas semanas, hasta que junio asome en el horizonte, salvo que te escapes a zonas costeras o residas en ellas y puedas disfrutar de tiempo de ocio acompañado por buen clima. En este caso, si el cuerpo te lo pide y las circunstancias invitan a ello, cede ya el testigo al calzado propio del verano. Recuerda, eso sí, que este tipo de zapato que deja el pie a la vista, parcialmente o totalmente, salvo excepciones muy puntuales, es incompatible con entornos laborales estándar.
El contexto manda
En definitiva, la respuesta más acertada que podemos dar a la pregunta que nos planteamos en esta pieza es que dejemos al sentido común que se imponga. No es lo mismo residir en Madrid que hacerlo en Málaga o en Oviedo, por ejemplo, donde reinan tres tipos de clima muy diferentes entre sí. Sus exigencias, en lo que a la ropa y el calzado se refiere, no tienen tampoco nada que ver a lo largo de la primavera.
Además, tampoco se pueden encontrar puntos en común entre trabajar en una oficina y hacerlo en casa . Evidentemente, en el segundo escenario tiene todo el sentido del mundo tener ya a mano el calzado de verano porque en cuanto el tiempo lo permita, cabeza y corazón te pedirán echar mano de él tanto como de las bermudas.
Por lo tanto, dado que no existen reglas ni leyes de estilo que lo impidan, y por mucho que la invoquemos a menudo tampoco es real la figura de la “policía de la moda”, puedes perfectamente cambiar, de manera paulatina y sin guardar todo el calzado de invierno todavía, a los zapatos de verano, siendo los mocasines la opción más acertada hasta que el verano llegue de nuevo a nuestras vidas.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete