Günther Anton Krabbenhöft, el influencer alemán de 76 años al que debes seguir la pista

Hace ya algo más de un lustro que Krabbenhöft se hizo famoso en las redes sociales después de que se viraliza una imagen suya tomada en la estación berlinesa de Kotbusser Tor. Aquel día, Günther no había hecho nada distinto a lo que llevaba haciendo décadas: jugar con la moda, divertirse con ella de una manera acertada gracias a su buen gusto y su decisión para ir siempre un paso más allá y diferenciarse de la mayoría de semejantes. "Siempre me he vestido así. Cuando iba a trabajar, cuando iba a hacer ejercicio. Quiero verme a mí mismo con alegría. Así que siempre es un reflejo de mi yo interno ", le dijo poco después de su explosión mediática a Björn Akstinat, quien le había fotografiado y contribuido a la exposición mediática de Günther Krabbenhöft al publicar dichas imágenes en el blog Schickaa , especializado en cultura urbana y moda berlinesa.

No solo la edad de Krabbenhöft es una seña identidad de este influencer alemán que creció en Hannover antes de llegar a la capital alemana, sino que también lo es su manera de entender la moda: “ La ropa debe ser divertida. Y no me refiero a las tendencias de la moda . Cuando la belleza interior se une a la belleza exterior, hay una sinergia increíble. La ropa como forma de transportar algo de ti mismo”, explicó hace algo más de un año en una entrevista concedida al periódico Berlin Zeitung con motivo del lanzamiento de su libro ‘Solo se tú - Nunca eres demasiado mayor para ser joven’ -solo ha sido editado en alemán de momento-.

En la misma charla, Günther Krabbenhöft reconoce que le gustaría "ver a más personas experimentando y no ser tan conformistas con su fascinación. Hay un tesoro dentro de todos, así que, ¿por qué no compartirlo con los demás?". Él, desde luego, predica con lo que piensa y dice. Solo hay que ver para comprobarlo la riqueza y la variedad de prendas , todas de excelente calidad y con un fit al que no le puede poner un pero.

Trajes de tres piezas en una paleta de colores y estampados amplísimos, siempre muy ajustados a su delgada figura y rematados con una pajarita, el sombrero como accesorio inseparable, al igual que el chaleco incluso cuando cambie el pantalón de pinzas por los vaqueros, y una envidiable colección de zapatos y botas son los rasgos característicos del armario de Günther Krabbenhöft, cuyos looks crecen todavía más cuando posa junto a su buena amiga fashionista, Britt Kanja, su alter ego femenino, tan famosa como él en Berlín.

Con su aspecto vital y una actitud acorde con la imagen que emite con su estilo personal -baila música tecno como un chaval de 18 años-, Günther está en el lugar y en la época adecuada para brillar más si cabe: el impacto de las redes sociales, donde todo lo considerado diferente tiene repercusión, se suma al aura que tiene la ciudad de la que es icono, Berlín, el terreno más fértil que existe para que crezcan y florezcan personalidades tan creativas y vitales , llenas de carisma y personalidad, como la de Krabbenhöft, un espíritu joven en un cuerpo de más de 75 años que rezuma elegancia clásica impregnada de inspiración juvenil. Es, seguramente, el gran clavo ardiendo que tiene la cultura hipster en este momento, y no es ni mucho menos un mal clavo el de este alemán cuyo lema dice mucho de él: "Vive salvaje y peligroso".

Ya lo sabes, si vas a Berlín y te encuentras en algún club de tecno a un señor mayor con pinta de hipster elegante dándolo todo en la pista de baile, pídele una foto porque estarás frente a un mito viviente de la ciudad germana, Günther Krabbenhöft.