Por qué un perfume puede llegar a costar 18.000 euros

La respuesta está tanto en el bote del perfume, como en su interior. El Frasco de las Abejas es un icono de Guerlain desde hace 170 años, creado para albergar el Eau de Cologne Impériale, un regalo para la emperatriz Eugenia con motivo de su boda con Napoleón III. Está adornado con festones inspirados en las columnas de la Place Vendôme de París y 69 abejas, símbolo imperial francés. Con motivo de las fiestas de navidad, este año la diseñadora de joyas francesa Shourouk Rhaiem ha personalizado el frasco con su arte multicolor, convirtiéndolo en una auténtica joya.

Shourouk Rhaiem creó sus primeras piezas recubiertas de cristal en su taller de París hace más de quince años. Inspirada en sus viajes a Túnez, la cultura pop de los años 80 y el glamour de las películas de Hollywood, le gusta realzar los objetos cotidianos recubriéndolos con multitud de cristales de Swarovski® de distintos tamaños y colores. Y eso es lo que ha hecho precisamente con el Frasco de las Abejas: cada frasco, adornado con piedras preciosas, se elabora a mano en su taller de París, mediante refinadas y meticulosas técnicas de joyería que requieren largas horas de trabajo. El primer paso consiste en pintar los motivos del frasco que luego se cubren con pedrería. A continuación, elige los colores: la artista alinea ante sí una gradación de cristales que dará a cada pieza su carácter único. Por último, los aplica uno a uno para transformar el frasco en una obra de arte.

El diseño de este pefume-joya revela, por un lado, el famoso frasco del perfume Shalimar, diseñado en 1925, rodeado de plumas de pavo real, un guiño a las inspiraciones indias del perfume. Por el otro, la doble G entrelazada, emblema de Guerlain, está rodeada de deslumbrantes flores con pétalos multicolores, reflejo de la opulencia de los majestuosos jardines de Shalimar.

En su interior, esta joya de la perfumería, disponible por 18.000 euros bajo pedido, alberga Shalimar, el perfume que en 2025 cumple precisamente 100 años. Se trata, en concreto, del extracto de perfume, la versión más exclusiva e intensa de la mítica fragancia.

¿A qué huele Shalimar? Se trata del primer perfume ambarino para mujer de la historia y ofrece un aroma sensual, embriagador y atemporal. La fragancia se abre con una brisa de flores y bergamota, que se mezclan con la calidez de las notas de lirio, jazmín y rosa. Las notas balsámicas de vainilla y haba tonka le confieren voluptuosidad y potencia.