Vox pide explicaciones por el «adoctrinamiento» en las PAU catalanas: «¿Por qué las respuestas correctas defienden el catalanismo?»

Vox pregunta también a la Generalitat si «¿considera que es riguroso, desde el punto de vista académico, que se enseñe a los alumnos a destacar los aspectos represivos del franquismo sin mencionar la estabilización del país no el crecimiento económico de las décadas posteriores a la guerra? o ¿con qué fundamento se exige a los alumnos afirmar que la dictadura franquista impuso una 'criminalización de la huelga' o una 'subordinación de la mujer', mientras no se permite reflexionar críticamente sobre las violencias cometidas en la zona republicana durante la Guerra Civil?».

En sus preguntas lanzadas al Govern, consultadas por ABC, la formación insta a la Administración autonómica a revisar en futuras convocatorias el contenido y orientación del examen. «Se ha planteado el Govern revisar este examen por su evidente carga ideológica, que convierte una prueba académica en una herramienta de adroctrinamiento separatista, sectario y anticatólico, ¿qué medidas ha tomado para asegurar que los criterios de evaluación de los ejercicios con contenidos subjetivos no perjudican al alumnado por opiniones divergentes?», señala Vox. Y lanza una última cuestión: «No representa una forma de adoctrinamiento el hecho de que, para obtener la puntuación máxima, el alumno deba concluir que el retroceso de la mujer durante el franquismo fue 'inmenso' y que el papel de la Iglesia católica fue 'represivo, sin considerar otras perspectivas históricas?».

La diputada de Vox en el Parlament, Júlia Calvet, recuerda en declaraciones a ABC que la formación lleva años denunciando la orientación tendenciosa de la prueba. «Llevamos años denunciando que los exámenes de selectividad no son objetivos y que siempre se habla en positivo de ciertas épocas y otras de forma negativa, sin contraste con datos alguno. Pero es que este año, en manos de los socialistas ha sido peor que nunca. No solo han hecho lo mismo que cuando el gobierno estaba en manos de separatistas sino que la ideología en estos exámenes ha estado en su máximo esplendor», denuncia la diputada.

Hace especial hincapié en el ejercicio 3 de la prueba. «Tanto la opción A como la B hablan de «avances» durante la Segunda República y de «retroceso» durante el franquismo. Lo que se pretende con estos exámenes tan ideologizados es que haya miles de alumnos que repliquen sus consignas sin permitir ni una sola voz crítica. Esto no es educación esto es adoctrinamiento«, puntualiza Calvet y avanza que «desde Vox seguiremos fiscalizando y denunciando las intenciones de este gobierno corrupto que lo único que busca es añadir más ovejas a su rebaño de pensamiento único».

En otra tanda de preguntas al Govern, Vox denuncia que un año más la cifra de alumnos que piden los enunciados en castellano «figure como una incidencia», hecho que considera «discriminatorio» con respecto a la otra lengua oficial (catalán), y reclama la cifra de alumnos que pidieron los enunciados en español en cada materia.

Por último, la formación pide al Govern que dé explicaciones sobre sus constantes cambios de criterio en menos de 24 horas con respecto a la penalización de las faltas de ortografía en la evaluación, lo que, según denuncia, «causó inseguridad entre los 44.238 alumnos que se presentaron a las pruebas», y reclama la comparecencia de la secretaria general del Consejo Interuniversitario de Cataluña (CIC), Mercè Puig-Rodríguez-Escalona, y la coordinadora de las PAU en Cataluña, Pilar Gómez, para «informar sobre cómo se han llevado a cabo las pruebas y el modelo de examen planteado»