Los universitarios españoles, los más «piratas» y progresistas de Europa

Según el "Estudio internacional sobre estudiantes universitarios" que elabora la Fundación BBVA , la mayoría de nuestros universitarios vive con sus padres (un 70% frente al 10% de los suecos y el 18,3% de los alemanes) y el porcentaje de quienes trabajan es menor que en el resto de los países europeos que contempla el informe. Mientras que los españoles eligen universidad por cercanía, los británicos tienen en cuenta ante todo el prestigio de la institución, los italianos valoran sus salidas laborales y los suecos la exclusividad de la carrera.

Elaborado a través de 3.000 entrevistas personales en cada uno de los siete países que integran la muestra (Suecia, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y España), el informe de la Fundación BBVA señala a la población estudiantil española como la más escéptica con la formación: un 54% cree que la universidad "no prepara adecuadamente" para la vida profesional (un 62% en el caso de los estudiantes de Económicas), frente a un 22% de los matriculados en Reino Unido.

Los españoles se sitúan entre quienes dedican un promedio menor de horas a la semana al estudio, tan solo trece horas y media mientras que el tiempo promedio dedicado al estudio personal en Suecia e Italia supera las veinte horas. Sin embargo, el tiempo dedicado a horas de clase es mayor en nuestro país, junto como España, Francia y Alemania. El tiempo dedicado al estudio es mayor entre los de técnicas y ciencias de la salud y menor entre los de Económicas y otras Ciencias Sociales.

Los españoles, junto con los británicos, son los que utilizan más frecuéntemente los materiales de internet como recursos de estudio. Por el contrario, se sitúan entre quienes menos utilizan revistas especializadas.

Los datos de la Fundación BBVA son claros: españoles e italianos tienen un menor nivel de autonomía y son los que mayor nivel de desajuste perciben entre la formación universitaria y el mercado laboral.

Después de los suecos, son los que expresan un mayor nivel de aceptación de prácticas y formas sociales emergentes, en particular, el matrimonio entre parejas homosexuales. Ocho de cada diez universitarios españoles lo ven con normalidad.

Los estudiantes de nuestro país sacan matrícula en el pirateo informático. Según el informe, son los que se muestran más favorables a adoptar conductas ilegales relativas a la propiedad intelectual como bajarse películas y música de internet sin pagar, descargar software o instalar copias de los mismos en el ordenador en lugar de los originales.

El estudio, el cuarto que realiza la Fundación BBVA de estas características, refleja que la mayoría de los universitarios europeos pertenecen en mayor o menor medida a alguna religión. El porcentaje más alto de pertenencia religiosa, en torno al 70% se da en Italia, Suecia y Alemania, es cercano en Reino Unido y España (60%) y al 50% en Francia. Pese a estos datos, los universitarios expresan, a la hora de describirse a si mismos, como personas con un nivel de religiosidad muy bajo, con la excepción de los italianos que obtienen un 5.1 en una escala de cero a diez. En España, solo tres de cada diez encuestados se considera cercano a unas creencias religiosas.