La OMS sigue considerando el Covid-19 como emergencia de salud pública pero cree que está «en un punto de inflexión»

El número de muertos por Covid-19 sigue aumentando en el mundo y el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, manifestó estar «preocupado por la situación sanitaria». «Desde principios del pasado mes de diciembre el número de fallecimientos semanales declarados a este organismo no ha cesado de aumentar», afirmó.

La reunión del Comité de Emergencia de la OMS, que asesora al director general en la toma de decisiones, que tuvo lugar la semana pasada no concluyó con noticias tranquilizadoras y la agencia sanitaria de la ONU ha decidido mantener el nivel de alerta que está en vigor. Los expertos recomiendan «prudencia» aunque reconocen que entramos en una «fase transitoria" y "en un punto de inflexión".

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A pesar de todo, después de esta nueva reunión del Comité de Emergencia, la OMS mantiene su postura y señala que prefiere optar por la prudencia porque no se puede minimizar a un virus que, según su máximo representante, « nos ha sorprendido y continuará sorprendiéndonos ». «Seguirá matando a menos que no hagamos nada por evitarlo ».

El Comité de Emergencia de la OMS recomendó a Tedros que declarase la emergencia sanitaria el 30 de enero de 2020 en un momento en el que China había declarado menos de un centenar de muertes por Covid-19. Actualmente, los expertos estiman que aunque estemos probablemente en un punto de transición habrá que navegar por ella con prudencia.

Tedros lamentó en un comunicado, que gran parte de la población mundial aún no esté correctamente vacunada y que la secuenciación del genoma del SARS-CoV-2, que permite seguir la evolución del virus, haya disminuido considerablemente. De acuerdo con las últimas cifras de la OMS, la enfermedad ha causado oficialmente 6.804.491 millones de muertos.

Para la OMS, las cifras de fallecidos o las de infectados por el virus, unos 752.517.552 contabilizados el pasado 27 de enero, no representan la realidad entre otros motivos porque al disminuirse fuertemente las pruebas de diagnóstico los nuevos casos de infección no han sido declarados al organismo.