Los agresores sexuales a menores tendrán un control permanente de las empresas que los empleen

Otros dos titulares: «Detenido un profesor británico por agredir sexualmente a un menor»; «Arrestado un alemán buscado internacionalmente por agresión sexual». En este caso, el vínculo es que son ciudadanos europeos que pueden haber solicitado un trabajo con menores al carecer de antecedentes en España aunque los tuvieran en su país.

Son sólo cuatro casos del rosario de ejemplos que se producen en los entornos laborales y que afectan principalmente a monitores deportivos y de actividades culturales y de ocio así como a profesores y entrenadores en colegios. El Gobierno ha detectado la existencia de una serie de lagunas en la legislación vigente, por lo que ha decidido tomar cartas en el asunto.

Según ha podido saber ABC, el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar hoy una una reforma del Registro Central de Delincuentes Sexuales para reforzar la protección de la infancia y evitar que agresores sexuales puedan acabar trabajando cerca de menores pese a los controles existentes. Y si no impedirlo, al menos estrechar el círculo lo más posible.

Las medidas son un desarrollo de la Ley Orgánica 8/2021, de protección integral a la infancia frente a la violencia, y pivota sobre tres ejes. El primero consiste en establecer controles periódicos de los trabajadores y hacerlo a instancias del empleador. El problema detectado por el Ministerio de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes es el siguiente: el sistema actual establece que cualquier trabajador que tenga contacto frecuente con menores de edad no debe tener antecedentes penales por delitos sexuales. Sin embargo, el certificado de esta situación se aporta por los candidatos al puesto antes de comenzar a trabajar, de manera que puede ocurrir que un trabajador no tenga dichos antecedentes antes de integrarse en su puesto de trabajo, sí los tenga después, pasando desapercibida esta situación para el empleador.

Para tratar de resolver este agujero legal, la reforma pretende habilitar a las empresas y entidades, ONG e incluso colegios profesionales para solicitar un certificado negativo de antecedentes sexuales a los empleados que realicen actividades que impliquen contacto habitual con menores de edad, con el consentimiento de éstos. De esta forma, se busca permitir a los empleadores verificar de manera efectiva si la persona que van a contratar no tiene antecedentes sexuales y facilita un control periódico que pueda detectar si una persona ya contratada es condenada con posterioridad por un delito sexual o de trata.

En la actualidad, cuando un ciudadano europeo que reside desde hace poco tiempo en España pide un certificado de inexistencia de antecedentes penales, puede ocurrir que obtenga un certificado «limpio» en España al carecer de antecedentes en nuestro país, aunque sí los tuviera en su país de origen. Para tratar de impedirlo, la reforma del Gobierno establece que a partir de ahora, hasta que no está el certificado completo (España y país de origen) no se obtendrá el certificado de antecedentes sexuales. Con la nueva regulación se trata de impedir que, en el espacio europeo, alguien pueda escaparse de los delitos cometidos en otro Estado miembro.

El tercer eje sobre el que pivota la reforma del Gobierno parte de una cuestión terminológica: el Registro Central de Delincuentes Sexuales será, también «de trata de seres humanos». En consonancia con este cambio de denominación, ahora también incluirá información sobre las personas condenadas por trata de seres humanos, con independencia de la edad de la víctima y de la finalidad de la trata.

Por último, la reforma también prevé que no sean los ciudadanos quienes solicitar este registro al poder hacerlo sus futuros empleadores. Es más, habilita a las personas mayores de 16 años a solicitar los certificados sin asistencia de representante, que hasta ahora era obligatorio, algo que tiene importancia a la hora de solicitar trabajo como monitores de campamento o socorristas de piscina, donde dicho certificado es necesario al estar en contacto con menores.