El obispo de Alcalá de Henares afirma que los gais acaban en «clubes nocturnos de hombres» para comprobar su sexualidad

Pero el prelado no solo ha arremetido contra los homosexuales, sino también contra los jóvenes que hacen botellón cada fin de semana porque piensan "que van a descubrir el paraíso" y que salen de las discotecas después de una noche de fiesta como "cadáveres ambulantes". Y Reig Plá también se acordó de las mujeres que por culpa de la "malicia del pecado" se ven abocadas a interrumpir su embarazo. "Cuando va a abortar a una clínica, (la madre) sale destruida porque ha destruido una vida inocente y se ha destruido así misma. Durante años, mujeres que han ido a abortar llevan el sufrimiento en su corazón y muchas de ellas no pueden dormir y han pasado años y años y años porque el pecado siempre lleva como paga la destrucción de la persona", ha afirmado.

También ha advertido el obispo de Alcalá sobre las posibles consecuencias que puede haber en la cercanía de un hombre y una mujer casados en sus puestos de trabajo. Por culpa de la "malicia del pecado", esas relaciones pueden despertar en sus corazones "la atracción", lo que puede terminar en "todo un proceso que haga de ellos como si fueran marido y mujer llevando una vida conyugal". Reig Plá ha asegurado que esta situación es un "engaño" y una "injusticia", en una intervención eucarística cargada de polémica. No obstante,