Castellers y calçots para catalanizar a los nuevos médicos del hospital Clínic de Barcelona

El proyecto se presentó el martes en una sesión informativa abierta a todos los residentes de primer año del Hospital Clínic, donde se explicó el funcionamiento y beneficios de la iniciativa. Actualmente, el Hospital Clínic cuenta con 125 residentes de primer año, de los cuales 50 proceden de fuera de Cataluña.

Según datos del Colegio Oficial de Médicos de Barcelona (COMB), más del 60% de los nuevos colegiados en Medicina en Cataluña no son catalanohablantes, y muchos residentes desconocen, según los impulsores de la iniciativa, «los derechos lingüísticos de los pacientes». «Aunque existen requisitos legales tanto para la contratación como para el cumplimiento de estos derechos, no existen programas específicos de acogida lingüística para los profesionales sanitarios que se incorporan al sistema de salud catalán», precisan en el comunicado.

«Por eso, Salud por el Catalán impulsa este programa de acogida dirigido a los residentes, un colectivo clave en la atención sanitaria, con el objetivo de facilitar su integración y garantizar una mejor comunicación con los pacientes», aseguran los portavoces de la asociación.

«Queremos proporcionar a los profesionales sanitarios las herramientas necesarias para garantizar el derecho de los pacientes a ser atendidos en su lengua y, al mismo tiempo, ofrecerles la oportunidad de conocer mejor el país: su cultura, geografía, historia, tejido asociativo y empresarial», asegura Lluís Mont, presidente de la asociación.

Por su parte, el director de docencia del Hospital Clínic , Gerard Espinosa, ha subrayado la importancia de la iniciativa: « Este programa supone un paso adelante en la formación de nuestros residentes, ofreciéndoles herramientas para comunicarse mejor con los pacientes y adaptarse a nuestro sistema sanitario. Además, fomenta una atención más cercana y de calidad».

El Programa de Acogida Lingüística y Cultural incluye diversas actividades diseñadas para ofrecer una experiencia inmersiva en la lengua y la cultura catalana desde cursos de catalán para residentes, que se impartirán en colaboración con los Departamentos de Salud y Política Lingüística; la creación de 'parejas lingüísticas' entre profesionales del centro para fomentar la práctica de la lengua autonómica en un entorno informal, o la iniciativa de 'tomar un café en catalán', dirigida a «facilitar un café con personas de interés para los residentes».

En el marco del programa se ofrecerá igualmente a los residentes la posibilidad de realizar «salidas» dirigidas a que conozcan de primera mano la realidad cultural catalana. La primera, según ha avanzado la asociación, serán «una visita guiada al Monasterio de Poblet (Tarragona), y una 'calçotada' (los 'calçots' son un producto típico de la gastronomía catalana), para descubrir el país, su historia, sus costumbres, etc...».

También se organizarán «visitas guiadas por Barcelona para conocer el patrimonio de la ciudad en catalán» y se les facilitarán contactos con el tejido asociativo (centros excursionistas, grupos 'castellers', grupos de gigantes, de teatro, música, etc...). Este programa piloto en el Clínic nace, según señalan sus impulsores, «con la voluntad de extenderlo a otros hospitales del sistema sanitario catalán». La asociación agradece el apoyo de la Fundación La Caixa a la iniciativa.