Pobres, inmigrantes y transexuales, en primera fila para recibir el féretro del Papa en Santa María la Mayor
Se han situado a ambos lados de la escalinata, dentro del recinto vallado, flanqueando el lugar por donde han pasado los restos
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Editorial: Reconocimiento universal
Un grupo de 40 personas vulnerables ha recibido el féretro del Papa a las puertas de Santa María la Mayor
El papa quería que, cuando cayera el telón de los actos de su funeral, las personas excluidas estuvieran allí, y así ha sido. A la llegada del féretro a la Basílica de Santa María la Mayor -el lugar escogido para la inhumación-, un grupo ... de cuarenta pobres, presos, transexuales, sin techo e inmigrantes esperaba los restos del pontífice portando cada uno de ellos una rosa en la mano. Ha sido el último gesto hacia los desamparados de un pontificado que se propuso ponerlos a ellos en el centro y renovar así el voto de pobreza de la Iglesia.
Esta mañana el grupo se ha situado a ambos lados de la escalinata que da acceso a la basílica mariana, dentro del recinto vallado. Primera fila para los que ocupan "un sitio preferencial en el corazón de Dios", como escribió el Papa en la exhortación apostólica 'Evangelii gaudium' (2013) y como volvió a repetir la Santa Sede cuando explicó las razones de la presencia de este grupo en la entrada a la Basílica.
Flanqueaban el lugar por donde ha pasado el féretro, sobre los hombros de los sediarios pontificios, esos laicos al servicio del papa que hacen las veces de porteadores y que han sido protagonistas en estas últimas horas de funeral en Roma. Los restos del pontífice han entrado entre aplausos, y con el repique de campanas como telón de fondo.
La Santa Sede ya había anticipado el pasado jueves que habría un grupo de personas vulnerables en el acceso a la Basílica, porque «los pobres ocupan un lugar privilegiado en el corazón del Santo Padre, que eligió el nombre de Francisco para no olvidarlos nunca», explicó el Vaticano. La sombra de 'Il poverello d'Assisi' ha sobrevolado el pontificado del argentino. "San Francisco de Asís escuchó la voz de Dios, escuchó la voz del pobre, escuchó la voz del enfermo, escuchó la voz de la naturaleza. Y todo eso lo transforma en un estilo de vida. Deseo que la semilla de san Francisco crezca en tantos corazones", se lee en la encíclica 'Fratelli Tutti' (2020).
Un grupo de personas reciben el cuerpo del Papa en la escalinata de la basílica.
En el grupo había personas del colectivo trans. Precisamente, una de las fotografías que va a dejar este funeral es la de Sor Geneviève, la monja amiga del papa que el viernes se saltó el protocolo y pasó por delante de las autoridades para situarse cerca del féretro en la Basílica de San Pedro. Ella fue quien le presentó a un grupo de prostitutas transexuales latinoamericanas a las que el pontífice ayudó.
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