Parlamentarios alemanes comienzan su visita a España para investigar si las fresas dejan sin agua a Doñana

La misión de la delegación, encabezada por el presidente del comité, Harald Ebner (Los Verdes), se enfoca, textualmente, en «la escasez de agua y la protección del consumidor».

El parlamento alemán reconoce que España es una de las naciones industriales más afectadas por la escasez de agua y sufre problemas de sequía crónicos. Está dispuesto a apoyar las políticas de protección del agua y da por hecho que «en caso de sequías de corta duración, existe el riesgo de pérdidas en la agricultura», que habría que asumir. Se considera implicado en el problema porque «también puede afectar a los consumidores alemanes, que obtienen alrededor del 27 por ciento de las frutas y hortalizas frescas de España».

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Rosalía Sánchez

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A juicio del parlamento alemán, «el cultivo de fresas es particularmente intensivo en la región del Parque Nacional de Doñana, uno de los humedales más importantes de Europa y, por lo tanto, un punto crítico de biodiversidad». «Debido a la extracción ilegal de agua por parte de la agricultura para el riego, especialmente para el cultivo de la fresa, Doñana -acompañada de una persistente sequía- se encuentra gravemente amenazada por la deshidratación», culpan a los agricultores. «Este problema actual es de particular interés para la delegación y será el centro de sus conversaciones», señalaron en su día.

La visita comenzará con entrevistas oficiales con representantes gubernamentales de alto rango. El primer día, en Madrid, la delegación se reunirá con el secretario de Estado de Medio Ambiente y el secretario de Estado de Consumo, para tratar con ambos la evolución actual de la legislación de protección al consumidor. Después la delegación visitará la comunidad autónoma de Andalucía, donde pretende encontrarse tanto con miembros del gobierno regional como con representantes de organizaciones de protección ambiental y asociaciones de agricultores. La delegación también se reunirá con científicos, representantes de fundaciones políticas y dueños de cultivos.

En Alemania, una campaña ha recogido 140.000 firmas pidiendo el «boicot a la fresa española para salvar Doñana». «Para vender fresas baratas en los supermercados alemanes, en España se seca el Parque Natural de Doñana», argumenta la campaña promovida por Frederike Gravenhorst, de las Juventudes Verdes de Bremen, «Edeka, Lidl y compañía son los mayores clientes de las fresas de la sequía y deben dejar de venderlas», señala.