El Papa firma una camiseta del equipo de Mateo, el niño asesinado en Toledo

Eva Fernández le contó algunos detalles de la muerte del niño jugador de fútbol de 11 años, la cercanía de la población con esta familia, y cómo desde los primeros instantes de la tragedia, la familia solicitó «justicia y no venganza», aún sin saber entonces quién era el autor de las puñaladas. El Papa ha deseado enviarles también un rosario.

El crimen suscitó en redes sociales una oleada de racismo, cuando se difundió la sospecha de que el autor era un emigrante. El portavoz de la familia, el periodista Assel Sánchez, llegó a solicitar «no criminalizar a nadie por su raza, etnia, color o origen y dejar trabajar a la Guardia Civil», palabras que desencadenaron una campaña de hostigamiento en redes sociales.

Noticia Relacionada

El Papa emprende su viaje más largo y extenso: una gira de once días por Asia y Oceanía

Javier Martínez-Brocal | Corresponsal en El Vaticano

Pone a prueba su salud y visitará cuatro países: Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur

En sólo 30 horas, la Guardia Civil arrestó al autor de las puñaladas, un joven de 20 años español y del mismo pueblo, con severa discapacidad intelectual. Aseguró que había escogido la víctima al azar.

Sobre los migrantes, el corresponsal de RNE, Jordi Barciá, ha preguntado al Papa si está al corriente de la crisis humanitaria en Canarias. «Lo sé, lo sé», ha respondido Francisco.

Clement Melki, de la agencia France Press, le ha narrado su viaje con la nave Ocean Viking en el Largo de Malta, donde participó en una operación de rescate de emigrantes procedentes de Bangladés y le ha regalado la linterna acuática que los emigrantes llevaban sostenida con gomas a la cabeza. «Gracias por el trabajo que hacen de ayuda a los migrantes», ha respondido Francisco.

El Papa se ha detenido unos 30 minutos en la zona trasera del avión, donde ha conversado informalmente con unos 80 periodistas, pero ha evitado adelantar contenidos de su viaje. «Gracias por vuestra compañía, creo que es uno de los viajes en avión más largos que hemos realizado», ha saludado.

Entre las anécdotas, Francisco ha recordado que una periodista que va en el avión cumple 160 viajes papales. Se trata de Valentina Alazraki, corresponsal de Televisa (México), que hizo su primera travesía con un pontífice en 1979, cuando acompañó a Juan Pablo II a Ciudad de México. También la corresponsal argentina de La Nación, Betta Piqué, le regaló un ventilador de bolsillo, y le explicó que, según las crónicas de 1970, Pablo VI pasó mucho calor en la catedral de Yakarta.

En el avión, Francisco, de 87 años, tenía buen aspecto, y ha recorrido todo el pasillo con la ayuda del bastón, para intercambiar un saludo con cada pasajero. No parecía preocupado ni por la humedad del sudeste asiático, ni por el cansancio, ni por la intensa agenda que le espera.

El Papa llegará a las 11:30 hora local a Yakarta, las 6:30 hora española. Con él viajan un médico y dos enfermeros Massimiliano Strappetti y su nuevo asistente personal, Daniele Cherubini, que trabajó también en el ambulatorio vaticano. Nada más aterrizar se trasladará a la nunciatura y se recuperará del cansancio del viaje y de las cinco horas de diferencia. La agenda de la visita comenzará el miércoles con su encuentro con el presidente Joko Widodo y su primer discurso político al país.

Al menos en los primeros días de viaje no le podrá acompañar el cardenal Pietro Parolin, pues el sábado falleció su madre y este martes él mismo celebrará los funerales.