Los oncólogos temen un aumento de cáncer de mama entre las personas transgénero

El mayor riesgo de desarrollar este tumor es estar en contacto con estrógenos, las hormonas sexuales femeninas y ambos, en mayor o en menor medida, lo están. Los hombres trans porque nacieron siendo mujeres y sus óvulos produjeron estrógenos hasta que iniciaron su transición. Y las mujeres transgénero porque se hormonan para desarrollar caracteres femeninos.

Cuando las mujeres inician su transformación física para ser hombres no todas se amputan sus mamas por lo que el peligro permanece. También se mantiene el riesgo cuando ellos inician el camino contrario, en este caso porque la cirugía para extirpar los testículos elimina la producción de testosterona que contrarrestaría el efecto de los estrógenos.

«Es un riesgo real y debemos concienciar de que el cáncer de mama existe en el colectivo trans. No queremos alarmar, solo informar y vincular a esta población a las campañas de prevención», aclara Ignacio Miranda, responsable del área de radiodiagnóstico del IBCC, el Centro Internacional de Cáncer de Mama y uno de los oncólogos que han alzado la voz para advertirlo.

Teme, además, que puedan quedar excluidos de los programas de detección precoz de la sanidad pública. Por un lado, las mujeres transgénero que han desarrollado una mama que es igual de madura que la mama de cualquier mujer, pero que no han realizado el trámite administrativo de reasignación de género. Administrativamente siguen siendo hombres y quedarían fuera del cribado. También pueden quedar fuera varones transgénero que mantienen sus mamas y sí han registrado su cambio de sexo como hombres. «Sin una mastectomía tendrían tejido mamario y por tanto un riesgo de cáncer de mama», insiste Ignacio Miranda.

No existen datos en España de cáncer en personas trans. El mayor estudio realizado hasta la fecha es holandés y descubrió 15 casos de cáncer de mama invasivo entre las 2.260 mujeres trans que participaron en el estudio, lo que supone un riesgo 46 veces mayor que el de cualquier hombre. En el caso de los hombres trans, se identificaron cuatro casos entre 1.229 participantes, con la mitad de probabilidades de tener un tumor que cualquier mujer, una tasa más baja «de lo esperado», señalan los autores del estudio publicado en British Medical Journal.

«Nos faltan estudios y más información, pero probablemente en los próximos años el riesgo entre hombres y mujeres trans termine por igualarse. Las nuevas leyes favorecen la transición a edades más jóvenes y en el caso de las mujeres trans estarían más tiempo expuestos a estrógenos», opina el especialista del IBCC .

Los casos de personas trans que llegan a las consultas ahora son escasos. «Pero es una realidad y estamos preocupados por lo que está por venir, habrá más casos». En 2017 se estimaba que la población transgénero en España la integraban unas 10.000 personas. Cinco años después, cerca de 21.000 personas fueron tratadas en las unidades especializadas en el tratamiento de identidad de género, según datos publicados en enero de 2023.

El oncólogo Javier Cortes, director del IBCC, también prefiere anticiparse: «La sociedad cambia más deprisa que el sistema, por lo que las administraciones y el personal sanitario, en general, debemos entender que existen diferentes realidades. Mientras los cambios en el sistema lleguen a completarse, los profesionales sanitarios debemos estar atentos para que este colectivo no pierda oportunidades».