Las llamas amenazan Monfragüe, gran bastión del buitre negro: «Restaurar este hábitat sería casi imposible»

El viento ha dejado el fuego en la frontera de Monfragüe, pero la experiencia con los incendios de Las Hurdes o Sierra de la Culebra avisa de que, en cualquier momento, las llamas pueden volverse imparables. Con 18.396 hectáreas, Monfragüe fue el primer espacio protegido de Extremadura. Logró ser declarado parque natural en 1979 y, casi treinta años, se erigió en parque nacional por su gran riqueza medioambiental. Allí anida la segunda colonia de buitre negro más importante de Europa, así como decenas de águilas imperiales, de las que apenas hay un millar de individuos en el mundo. Cigüeñas negras, buitres leonados, alimoches, águilas reales, búhos reales, águilas culebreras, águilas calzadas y milanos reales figuran en una larga lista de especies que es posible gracias al bosque mediterráneo y a la peculiar topografía del lugar.

«Es un sitio especial, lleno de aves protegidas y, por ahora, el incendio ya ha quemado en zonas de reproducción de águila imperial, águila real y alimoche», explica Cardalliaguet. El experto cree que los nidos de estas especies estaban ya vacíos, pero si el fuego se dirige hacia el interior del enclave, hacia el valle del Tajo, hay nidos de buitre negro que se verían en peligro. «Esta especie sí tiene pollos en el nido sin poder volar, es un riesgo muy grande«, explica.

La organización ha valorado junto a la Junta de Extremadura la posibilidad de montar un operativo para salvar los nidos, unos 15 o 16 de buitre negro, así como de cigüeña negra, muy escasa en España y también en época de cría, pero ha quedado descartado. «Es inviable. Es una zona de acceso a pie imposible y es muy arriesgado entrar en la zona«, asegura. Son áreas escarpadas y de difícil escape. Las aves están a su suerte.

La situación del incendio que se declaró en Casas de Miravete para las próximas horas es «adversa», con constantes cambios de viento durante todo el día, ha explicado este viernes la directora general de Emergencias, Protección Civil e Interior de Extremadura, Nieves Villar. Los efectivos están luchando en los flancos del parque nacional y se va a utilizar retardante en lugar de agua en alguna zona e intentar parar el fuego.

El incendio ya ha afectado a valles con vegetación mediterránea, pero de profundizar, las labores de extinción serán complicadas y los daños pueden ser difícilmente revertidos. «El hábitat más valioso es el bosque mediterráneo, son bosques de alcornoques, con una laurisilva mediterránea muy rara. Son zonas valiosas y muy escasas en España. Constituyen un hábitat casi imposible de restaurar y menos con las condiciones climáticas que tenemos», asegura Cardalliaguet.

La afección de este hábitat es el que más preocupa al experto. «Las especies, aunque pierdan una generación, tienen más nidos en otros sitios, pero la pérdida de estos hábitats tan valiosos son irrecuperables. Por lo menos a medio plazo», asegura el delegado.