La Iglesia recupera el número de bodas y bautizos de antes de la pandemia pero con casi mil trescientos curas menos

Desciende ligeramente el número de fieles que asiste a misa, pero aumentan las colectas en más de un once por ciento

La Iglesia repite una recaudación récord a través de la Renta y ya alcanza los 358 millones de euros

Ester Martín, directora de la Oficina de la Trasparencia de la Conferencia Episcopal, junto al secretario general, César García Magán en la presentación del Informe Navarro Pareja

La Conferencia Episcopal ha presentado este martes su Memoria de actividades correspondiente al año 2022, un documento que elabora la Oficina de Transparencia de los obispos para dar cuenta del destino de los 358.793.580 euros que, según informaron la semana ... pasada, han recibido de los contribuyentes en el último ejercicio de la Renta. Un texto que, a través de «330 indicadores», permite pulsar la realidad que desarrolla la Iglesia «en el marco de sus fines propios: anunciar, celebrar y vivir la fe», tal como ha comentado la directora de la Oficina de Transparencia, Ester Martín.

Entre los datos destaca el aumento en la celebración de los sacramentos. Como el número de bautizos, que se sitúa en 2022, en 159.129 -9.418 más que en el año anterior- el de matrimonios, 35.253 -9.491 más que en 2021-, al igual que en confirmaciones, 104.600 -con un aumento de 1.016- y el de unción de enfermos, 27.788 -con un crecimiento de 743 con respecto al anterior ejercicio-. Un aumento que, en la práctica, supone una vuelta a la normalidad tras el llamativo descenso que se vivió a partir de 2020, con las restricciones de la pandemia.

«Veníamos de años de una caída muy importante de los sacramentos, por una situación excepcional que era el Covid y en parte se están restableciendo las cifras normales que teníamos, a la par que también hemos constatado que hay personas que están en situación de búsqueda y se han acercado de nuevo a las parroquias», ha explicado la directora de la Oficina de Transparencia. «Es una evolución normal y natural que refleja la religiosidad que se vive en nuestro país», ha añadido.

Sin embargo, el dato contrasta con el significativo descenso en ese mismo periodo del número de sacerdotes. Mientras que en 2019, previo a la «era Covid», la Iglesia contaba con 16.960 curas, en 2022, el número se ha reducido en casi mil trescientos (1.291), para quedarse en 15.669, un 7,61% menos en cuatro años. Un descenso que no tiene visos de frenarse, dado que la Memoria también consolida el dato de seminaristas del curso pasado, que por primera vez bajaron de los mil, para quedarse en 974.

Preguntado por ABC sobre las dificultades que la Iglesia puede tener para mantener su actividad si persiste este descenso en el número de curas, el secretario general de la Conferencia Episcopal, César García Magán, también presente en el acto, ha reconocido que el sacerdote «es casi imprescindible en la casi totalidad de sacramentos». «No hablaré de colapso, pero sí que implica una mayor carga de servicio pastoral, que los sacerdotes hacemos con gusto. Gracias a Dios no estamos en un nivel de escasez de sacerdotes que impida esa celebración sacramental», ha apuntado.

72 millones de euros para la labor asistencial

En general, los datos de la Memoria reflejan una estabilidad en la participación y colaboración de los españoles en la vida de la Iglesia católica. Por una parte, la Conferencia Episcopal cifra en 8.048.484 el número de fieles que acude a misa de forma regular (211.516 menos que el año anterior, un descenso del 2,5%). Unos católicos que son, por contra, más colaboradores con la institución, pues las colectas han aumentado un 11,38% para situarse en 382,1 millones de euros. Estas aportaciones a través del cepillo, junto al IRPF, las derivados del patrimonio, ayudas y subvenciones configuran la principal vía de financiación de las diócesis españolas, que en el anterior ejercicio alcanzaron unos ingresos de 1.255 millones de euros.

De ellos, cerca de la mitad se destinan a las retribuciones del clero y del personal seglar contratado y unos 367 millones, a la conservación de edificios y gastos de funcionamiento. Según el informe, a la labor asistencial, las diócesis destinaron un total de 72 millones de euros, 17 millones más que en 2021. En ese sentido, también inciden en que esta labor social «acerca cada día el verdadero rostro de la Iglesia a muchas personas de nuestra sociedad». Así, en los últimos diez años, los centros asistenciales de la Iglesia han aumentado en un 64,81%. Según los datos de 2022, en España hay 8796 centros de este tipo (3.459 más que en 2010) y el número de personas beneficiadas asciende a 3.778.740.

Otra de las cuestiones que destaca la Memoria es la labor educativa de la Iglesia, que atiende a un millón y medio de alumnos en 2.536 centros educativos católicos. Según los cálculos realizados por la Conferencia Episcopal la existencia de estos centros católicos le ahorra al Estado un total de 4.213 millones de euros.

La «veracidad» de CIS de Tezanos

Uno de los datos que ha desaparecido de la Memoria es el porcentaje de población que se considera católica, extraído en años anteriores del barómetro que el Centro de Investigaciones Sociológicas publica cada mes. El año pasado, la Iglesia presentaba un porcentaje de 67,2%, a todas luces anticuado, pues para diciembre de 2021, el CIS establecía en un 58,9% la suma de los que se declaran católicos practicantes y los no practicantes. Sin embargo, esta vez, el dato se ha omitido, curiosamente, sin eliminar el asterisco que en ediciones explicaba la procedencia.

Preguntada por esta circunstancia, Ester Martín ha explicado que en la Memoria «reflejamos información de fuentes externas y en función de la veracidad, hemos decidido no incluir este porcentaje», en lo que ha sido entendido como una velada crítica a la entidad de la que proviene la referencia, el CIS.

La pregunta sobre adscripción religiosa, que se repite mensualmente desde hace décadas, ha sufrido serias modificaciones desde que José Félix Tezanos llegó al CIS en 2018. Primero, al introducir el matiz entre practicante o no sólo en la respuesta para los católicos y, después, en la aceleración en su decrecimiento. Hasta ese momento, el descenso anual era de alrededor de un punto. Pero, mientras que en diciembre de 2018 (Tezanos llegó ese julio a la institución) un 68,2% de los españoles se decía católico, en el último barómetro de 2022, el porcentaje se había reducido al 56,4%. Un drástico descenso de 11,8 puntos en cuatro años que parece estar detrás de la desaparición del dato en esta Memoria de actividades de la Iglesia.

Artículo solo para suscriptores

Accede sin límites al mejor periodismo

Tres meses 1 Al mes Sin permanencia Suscribirme ahora
Opción recomendada Un año al 50% Ahorra 60€ Descuento anual Suscribirme ahora

Ver comentarios