El Gobierno creará un grupo de trabajo con comunidades para fijar las nuevas reglas del trasvase Tajo-Segura

Así lo han anunciado este lunes la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y el presidente de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, tras una reunión conjunta mantenida en Madrid.

Ribera, que ha aclarado que «toca actualizar las reglas de explotación» del trasvase, ha explicado que la idea es contar con la opinión de los técnicos del las diferentes demarcaciones, del Tajo y del Segura. El objetivo es adaptar el funcionamiento del acueducto al nuevo plan hidrológico del Tajo, lo cual no implica una modificación de los caudales ecológicos del río, pero a efectos prácticos, según cómo se planteen los términos, sí puede suponer una merma de los envíos de agua al Levante. Según los diferentes volúmenes de agua en la cabecera del río y otros condicionantes, se fija la cuantía de agua que se puede trasvasar.

Ribera ha asegurado que las reglas están funcionando «bien», ya que en seis años solo ha habido «un mes» de trasvase cero, pero aun así, «hay que ver si hay introducir mejoras que nos permitan afinar más».

«Agradezco que la predisposición del ministerio para abordar esta cuestión no sea unilateral, y sí sea de diálogo y multilateral. Pronto habrá un nuevo grupo de trabajo con todas las autonomías implicadas. Me alegraré mucho de que esté Castilla-La Mancha, que esté Murcia, Andalucía, que esté Extremadura y todas las comunidades implicadas en un grupo de trabajo previo a que sea la propuesta de nuevas reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura», ha dicho Mazón. «Vamos a intentar soplar todos a favor», ha dicho, abogando por un acuerdo y de una «nueva etapa» política.

Además, ambos dirigentes han acordado también un «plan de emergencia» para la Albufera de Valencia, con labores de prevención y estudio, y también se está trabajando en cómo suministrar un trasvase de 10 hectómetros cúbicos que necesita el paraje.