El Grupo de Pacientes con Cáncer aplaude los ceses en Atrys pero pide seguir investigando las presiones a oncólogos

Para Gepac, la destitución del presidente del CEO de Atrys es una «consecuencia lógica y necesaria» tras las informaciones que publicó ABC sobre presiones a oncólogos para no prescribir los tratamientos de mayor coste a los pacientes de cáncer en la sanidad privada, que en cambio sí se utilizan en la pública.

Pero el grupo de pacientes considera que este movimiento no puede ser el cierre del caso, sino «el comienzo de una etapa que debe estar marcada por la transparencia, la investigación rigurosa y la depuración completa de responsabilidades».

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Ana Sánchez

Los grandes damnificados de esta situación, lamenta Gepac, han sido los propios pacientes. «La sola sospecha de que una decisión terapéutica pueda haber estado condicionada por intereses ajenos al criterio médico y al beneficio del paciente es de una gravedad inaceptable», reza el comunicado.

Por todo ello, el Grupo Español de Pacientes con Cáncer exige que se aclaren los hechos «hasta sus últimas consecuencias», así como que se garantice que una «nunca más una empresa sanitaria pueda poner en riesgo la integridad de los tratamientos oncológicos por motivos económicos«. Reclama así al Ministerio de Sanidad, a las administraciones autonómicas y a los organismos reguladores que actúen »con firmeza y celeridad«. »No basta con cambiar a las personas al frente de una compañía; es imprescindible revisar sus prácticas, establecer controles externos efectivos y asegurar que los intereses de los pacientes estén por encima de cualquier otro«, insisten.

El cáncer, hace hincapié Gepac, «no puede ni debe ser un negocio», por lo que la iniciativa 'Cáncer, cuestión de Estado' que promueve busca «blindar la atención oncológica desde lo público, con criterios de equidad, ética y sostenibilidad».

También la Fundación Eco ha asegurado que lo principal es asegurar los derechos fundamentales de los pacientes. «Como sociedad científica, desde Fundación ECO no entramos a valorar las decisiones empresariales. Nuestra única razón de ser es la salud de los pacientes y que se aseguren sus derechos fundamentales. Por ello, seguiremos velando porque se les garantice el acceso al mejor tratamiento disponible posible», han incidido.

Por otra parte, la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), que mantiene una investigación abierta sobre estas presiones desde que este periódico lo desveló, ha preferido no valorar los ceses en Atrys.