«No te quieres enterar, yeyé, que no me dejas fumar, yeyeyeyé»

Bajo un acto que recreaba la estética de mayo del 68 y acompañado por una veintena de personas que bailaban y cantaban al ritmo de «con estos requisitos, nos quitan los garitos» o «no te quieres enterar, yeyé, que no me dejas fumar, yeyeyeyé», el portavoz de esta entidad Javier Blanco se ha personado con 60 cajas en las que estaban todos los apoyos que conseguidos para evitar que siga adelante la reforma de la ley en los términos en que se está debatiendo.

«Son firmas con nombre, apellidos y DNI completo» que han sido recogidas a través de su plataforma «Prohibido Prohibir» , según ha reconocido Blanco, quien añade que todas ellas son de «fumadores y no fumadores que no quieren una prohibición total de fumar en espacios públicos y creen que la solución está en las medidas intermedias, que respeten el derecho prioritario del no fumador pero también el del fumador».

A su juicio, la ley actual ya garantiza un 60 por ciento del espacio de hostelería libre de humo , de ahí que se haya

agarrado a valores como la tolerancia, la convivencia o el respeto para pedir que se sigan manteniendo «medidas intermedias» que no vulneren el derecho del fumador. Además, ha asegurado que «en Europa hay un buen ejemplo de esta convivencia», ya que «sólo hay dos países con una prohibición total, mientras que el resto toman medidas intermedias».

«Es comprensible que no se pueda fumar en un hospital, un autobús o un avión», ha insistido Blanco, que sin embargo no entienden «por qué no se puede habilitar un espacio digno para fumar en los aeropuertos, o por qué un empresario que así lo desee no puede habilitar un espacio para sus trabajadores fumadores y evitar que tengan que salirse a la calle».

El objetivo de estas firmas, asegura, no es registrar una iniciativa legislativa popular ya que sería rechazada por la Comisión de Sanidad al instante, de ahí que hayan optado simplemente por hacer llegar estas firmas a los grupos parlamentarios «para demostrar que la gente está cansada de más prohibiciones».

Sobre la ley antitabaco anunciada por el Gobierno vasco, que amplía también la prohibición de fumar al interior de los coches, Blanco asegura que esta medida «hace que el País Vasco se parezca más a Bután o Corea del Norte, ya que es el colmo que se inmiscuyan en los espacios privados como un coche particular ». De hecho, ha reconocido que él tiene hijos y «jamás fuma cuando ellos están en el coche», animando a esta costumbre a todos los fumadores sin que los poderes públicos lo prohíban «por encima de la voluntad de los padres ».