Una Francia en alerta por el bullying prepara un plan de urgencia que incluirá el toque de queda digital

Este momento concreto ha provocado mucha polémica en el país galo por la exposición que se ha hecho del menor y por la carta publicada de los padres de la víctima quejándose al centro educativo donde estudiaba. Sin embargo, el gobierno galo ha defendido la actuación: «Es un mensaje muy contundente a los alumnos acosadores. Así es como haremos frente a la lacra del acoso y así es como protegeremos a nuestros hijos. En el fondo, ¿cuántas veces en los últimos meses hemos tenido que llorar tras la trágica muerte de un niño que se suicidó porque estaba siendo acosado?», aseguró el portavoz del Ejecutivo, Olivier Véran tras conocer los hechos.

Los padres han criticado la actuación de los polícias porque consideran que se debe proteger a los menores ante situaciones violentas. El adolescente, de 14 años, ha expresado su arrepentimiento y ya ha comparecido ante un magistrado de la fiscalía. Según el escrito, la víctima habría recibido comentarios como «te vamos a rajar la garganta», «te detesto» y «suicídate».

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El ministro de Educación, Gabriel Attal, se está implicando de lleno en el asunto para paliar los últimos casos de acoso del país. Tanto es así que el próximo 27 de septiembre su departamento presentará un plan interministerial contra el acoso, según ha adelantado el diario francés 'Le Parisien'. En este documenro se presentan una serie de medidas para luchar contra el acoso.

Gabriel Attal se inspira en Dinamarca para imponer un toque de queda digital. Pretende prohibir el acceso a internet desde las 18:00 de la tarde hasta las 08:00 de la mañana. Esta medida solo puede ser dictaminada por un juez de menores. El incumplimiento del toque de queda digital supondría una circunstancia agravante para el adolescente, que por tanto correría el riesgo de sanciones más severas.

El objetivo del ministro de Educación es limitar el registro en las redes sociales de los menores de 15 años. Aunque en Francia ya existe una ley parecida llamada ley Marcangeli, que se aprobó este año. En ella los menores necesitan el consentimiento paterno si son menores de 15 años para registrarse en plataformas como TikTok, Instagram, Facebook o Snapchat.

El Gobierno quiere que un juez de menores confisque el télefono móvil de los ciberacosadores en caso de acoso grave. Además, quiere que al inicio del proceso judicial no salga de la calle sin uno de sus padres.

El ministerio de Educación quiere crear brigadas antiacoso en cada colegio basada en los «Valores de la República», equipos que se encargan también de velar por cumplimiento de la laicidad en los centros educativos.