Los mejores trucos para enfriar una habitación sin aire acondicionado ni ventilador

Pero no todos pueden permitirse este electrodoméstico o mantenerlo encendido durante mucho tiempo, ya que los precios de la energía, como las temperaturas, siguen disparados.

Siempre queda recurrir a alimentos, como fruta fresca, bebidas frías o helados, para intentar rebajar esa sensación sofocante, pero seguirá haciendo calor en casa y los sudores volverán a aparecer en cuestión de minutos.

De este modo, la solución pasa por intentar enfriar el hogar, aunque no se disponga de aire acondicionado. Sí, aunque suene imposible se puede conseguir siguiendo unos fáciles pasos.

Es el momento en el que las temperaturas son más frescas y cuando hay que aprovechar que no hay incidencia solar. Normalmente, la franja horaria a la que conviene hacerlo es en la comprendida entre las 0.00 y las 8.00 horas. Si es posible, también es recomendable generar una corriente de aire, abrir dos ventanas contrapuestas, para expulsar el calor.

Una vez se ha enfriado la casa durante la noche, toca conservar esa temperatura. La mejor manera es cerrar ventanas y bajar persianas para evitar que el calor vuelva a penetrar en el domicilio.

Es sabido que en las zonas con más vegetación sufren menos los efectos de las altas temperaturas, ya que sirve como refrigerante natural. Tan solo hay que aplicar este principio a una casa: coloca varias plantas en las diferentes habitaciones.

La humedad consigue minorar los efectos calurosos. Esto queda reflejado en los días en los que la gente busca el refugio de las fuentes cuando la incidencia solar es muy potente. Bastaría con colocar cuencos o incluso barreños con agua fría en los dormitorios.

Es una de las formas más rápidas para refrigerar una habitación. Al verter agua sobre el suelo caliente, esta se evaporará y creará un efecto sauna a la inversa. Además, mantener el suelo frío también reduce la sensación de calor, especialmente si se pisa descalzo. Por esta razón, el suelo de la cocina (que es el que más se friega habitualmente) es el más fresco de la casa.

Aunque estén apagados, los electrodomésticos emiten calor porque la electricidad sigue circulando por sus circuitos. Es por ello por lo que si no se están utilizando, lo mejor que se puede hacer es desconectarlos por completo.

Aunando todos estos consejos, es más que probable que la estancia en casa con los termómetros por los aires sea más llevadera.