Cristianos Socialistas critica que Argüello reclame elecciones y le califica como «presunto seguidor de una ideología de derechas»

Un análisis y propuesta con la que, según entiende la corriente cristiana del PSOE, «el representante de la Iglesia Católica ha mostrado una clara tendencia política que no corresponde a lo que representa, sino a lo que piensa como presunto seguidor de una ideología de derechas». Una acusación de adscripción política que, sin embargo, los socialistas han dulcificado en un segundo comunicado para dejar la expresión en que señalan que Argüello «renuncia a representar a todos los cristianos y toma partido, cuando sus funciones son otras». Añaden que, con sus declaraciones, el presidente «muestra una clara tendencia política que no corresponde a lo que representa, y opta por desunir y confrontar». Sin embargo, en ese segundo comunicado, eliminan la referencia explícita de «presunto seguidor de una ideología de derechas».

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También modifican un segundo párrafo en el que el comunicado inicial afirmaba que «monseñor Argüello se suma, con indisimulado entusiasmo, a lo que desea el líder del Partido Popular, el señor Feijóo, y junto a él otros miembros y organizaciones de la derecha extrema y de la extrema derecha». En cambio, en la última versión, la frase acaba en «el señor Feijóo» y elude de nuevo las referencias a la «extrema derecha».

Ambos comunicados continúan, ya con la misma redacción, criticando que «el pronunciamiento de parte que hace el presidente de la Conferencia Episcopal Española contrasta con el silencio, la mayoría de las veces, o con su tibieza ante situaciones en las que sí correspondía que se pronunciara con contundencia y que afecta a miembros de la iglesia católica, o atentan contra los principios de respeto a la mujer, lucha contra la violencia machista y la homofobia, por citar ejemplos en lo que el grupo federal Cristianos Socialistas PSOE han lamentado públicamente su posición».

En ese sentido el comunicado no hace referencia a la reunión que el presidente de la Conferencia Episcopal mantuvo el pasado enero con la ministra de Igualdad, Ana Redondo, a petición de esta última, para acercar posturas sobre la polémica de las supuestas terapias de conversión y la decisión de la diócesis de Segovia de «negar la comunión a personas del mismo sexo que viven según el modo matrimonial». El encuentro —que duró una hora y veinte minutos, mucho más de lo previsto— transcurrió en «ambiente de cordialidad y confianza» y, a juzgar por las notas de prensa emitidas entonces por ambas instituciones, sirvió para que la ministra conociera de primera mano la doctrina católica, después de haberla cuestionado en público en varias ocasiones. Según el ministerio, también se abordó «la necesidad de integrar a la Iglesia en la defensa de los valores constitucionales de Igualdad».

En su nota, los socialistas cristianos señalan que no han escuchado las palabras de Argüello «con la necesaria contundencia cuando la sede socialista fue acechada por miembros de la derecha extrema y de la extrema derecha, ni tampoco cuando es pública y notoria la persecución a la que están siendo sometidos algunos miembros del PSOE», aunque no especifican a quienes se refieren.

El comunicado finaliza con el reconocimiento por parte de la corriente cristiana socialista de que «estamos en días difíciles», pero evita definir en qué sentido. La nota tampoco realiza ninguna autocrítica a las acusaciones de corrupción que han llevado a ser destituidos por el propio partido, a los dos últimos secretarios de organización del PSOE, designados por Pedro Sánchez. Los cristianos socialistas obvian también los audios machistas entre Koldo y Ábalos, grabados cuando eran militantes del partido, pese a que acusan a Argüello de no pronunciarse con contundencia ante la «violencia machista».

Por contra, se suman a la posición de defensa manifestada este lunes por el presidente Pedro Sánchez ante el informe de la UCO. Así, plantean que «es hora de mantener líneas de avance económico, social, cultural y hacer frente a la corrupción, con decisiones rápidas y contundentes». La nota concluye afirmando que «las palabras del arzobispo de Valladolid no contribuyen por su falta de sensatez, inclinándose por intereses políticos en una actitud que no representan el equilibrio y la mesura que debe corresponder a quien es presidente de la Conferencia Episcopal Española [sic]«.

Luis Argüello nunca ha eludido el manifestar su opinión en la esfera pública y política. En ese sentido, este mismo martes ha mantenido en el Congreso de los Diputados una reunión -junto a representantes de instituciones eclesiales, como el departamento de Migraciones, Cáritas, Confer y Redes— con los partidos políticos mayoritarios, PP y PSOE, para trasladar la necesidad de un acuerdo que permita la regularización de los migrantes que están en situación irregular.

Una petición a los partidos políticos que Argüello ha reclamado a título personal e incluso llevó al discurso inaugural de la asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal el pasado marzo. Lejos de criticar entonces la declaración política de monseñor Argüello, Cristianos Socialistas la respaldó con la publicación de un post en X.

De igual forma, hace unos días desde la misma cuenta también reposteaban una publicación de Argüello en la que condenaba «la tragedia humanitaria que se padece en Gaza» y pedía «redoblar la presión moral, política y espiritual para gritar en favor de parar la guerra y en favor de una paz justa». Entonces, en ninguno de los casos, desde Cristianos PSOE acusaron a Argüello de mostrar «una clara tendencia política».