Durante el turno de preguntas tras la presentación de los últimos datos de denuncias relacionadas con abusos cometidos por miembros de la Iglesia, el portavoz de los obispos ha recordado que «ser madre no es un derecho, sino un regalo», y ha recalcado que «la madre gestante no es una incubadora».
«La Iglesia, comprendiendo el dolor de no poder tener hijos y las dificultades, plantea sus reservas sobre el tema. No es por negar algo a la mujer, pero no puede ser una incubadora», ha reiterado el secretario general y portavoz de los obispos.
«En este tema no sólo hay dos personas (madre-hijo), sino otros actores, es una situación de muchas aristas. Está también la madre gestante, a la que no se puede considerar como si fuera una incubadora. Es persona, con todo lo que eso significa, esa relación íntima, única, singular, que no solo es química», ha señalado García Magán. Además, también ha defendido el derecho del hijo a saber quién es su padre. Por último, sobre este tema, ha denunciado una, «contradicción», que «conviene aclarar»: «Si se pide que la mujer sea libre para abortar la contrariedad es que no se sea libre para gestar».
Además, sobre el caso concreto de la presentadora Ana Obregón, que ha sido madre por gestación subrogada en Miami, García Magán ha asegurado que esa niña «por supuesto tiene derecho a ser bautizada» al igual que «se está administrando el bautismo a hijos de parejas homosexuales en las parroquias». También ha defendido que a estos niños nacidos por gestación subrogada hay que darles «toda cobertura legal».
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