Informe PISA: Un alumno pobre repite cuatro veces más que uno rico con el mismo nivel

Ahora, Save The Children junto con el 'think tank' EsadeEcPol ha hecho un análisis de los datos del prestigioso informe centrándose en la equidad. Para ello, han tenido en cuenta la puntuación en Matemáticas, repetición de curso y la segregación escolar. Todo ello midiendo el nivel socioeconómico, el origen de los estudiantes (españoles o inmigrantes) y sexo (hombre o mujer). Una de las conclusiones más relevantes es que «el alumnado de nivel socioeconómico bajo tiene casi 4 veces más probabilidades de repetir curso que su equivalente (en notas PISA) de nivel alto. Algo que tampoco ha cambiado desde 2018 y que nos sitúa a la cabeza de la OCDE».

El trabajo especifica que «la proporción de alumnado que ha repetido curso se ha reducido de un 28% (2018) a un 22% afectado por las medidas de promoción automática tomadas al final del confinamiento en mayo de 2020. Aun así, la repetición en España sigue siendo injusta: a igualdad de puntuación en matemáticas, un alumno de origen desfavorecido tiene casi 4 veces más probabilidades de repetir que un alumno de nivel socioeconómico alto, algo que no ha variado desde 2018». Se trata de la segunda brecha más alta de la OCDE. La repetición es más desigual en todas las comunidades respecto a la media OCDE, encabezadas por Murcia, La Rioja y Castilla y León, con un empeoramiento considerable desde 2018.

Lucas Gortázar, director adjunto de EsadeEcPol, señala al respecto que «no podemos hablar de igualdad de oportunidades sin mirar varios indicadores de éxito educativo. España lo hace bastante bien en cuanto a la equidad en el aprendizaje, pero rematadamente mal en cuanto a la equidad en el logro (que medimos con la repetición), siendo el país donde más desigual es la repetición, y siendo un problema en todas las comunidades. En España, la repetición es no solo desigual, sino muy extendida en casi todas las comunidades, y consecuencia pero también causa de problemas del sistema educativo. Es decir, es tanto un reflejo de una alta proporción de estudiantes con bajo desempeño, pero también agravante de las dificultades que esos estudiantes luego van a atravesar cuando terminen la Secundaria, pues es más probable que no titulen la ESO y no continúen estudiando», señala.

Por lo tanto, añade, «hay que replantearse otras formas de gestionar y dar respuesta a la heterogeneidad del alumnado en clase, ampliando los refuerzos y mejorando la formación al profesorado para trabajar con alumnado más heterogéneo».

El informe también señala que «en la mayoría de las comunidades la caída en resultados respecto a 2018 ha sido superior en el alumnado de origen nacional». La única excepción es Cataluña, que «presenta unas caídas especialmente pronunciadas para el de origen migrante». Cabe aclarar que el trabajo habla de alumnado de origen migrante y en esta definición incluye a la primera y segunda generación, es decir, a los nacidos fuera de España y a aquellos con padres nacidos fuera de nuestro país, respectivamente.

Por comunidades, el informe señala que «mientras en País Vasco un alumno de origen nacional o nativo obtiene casi 70 puntos más en Matemáticas que un alumno de origen migrante, en Andalucía o Canarias esta diferencia es prácticamente inexistente. En todas las comunidades, cuando descontamos el nivel socioeconómico, esta brecha se reduce sustancialmente [...] siendo especialmente relevante la reducción en Cataluña [...] y País Vasco. Respecto a la dimensión temporal de la diferencia del rendimiento en matemáticas en la prueba entre nativos y migrantes una vez se tiene en cuenta el nivel socioeconómico, la diferencia se ha reducido entre 2018 y 2022, siendo una caída que se ha producido en todas las comunidades con la excepción de Asturias, donde la diferencia ha crecido. Esto implica una mejora relativa del alumnado de origen migrante respecto al de origen nacional en casi todas las comunidades, especialmente en Andalucía, Navarra, La Rioja y País Vasco».