Alemania frena la visita «fuera de control» de sus diputados en Doñana

El comunicado de cancelación de la visita, emitido por el Bundestag alemán, señala como motivo «la gran importancia política que los temas del viaje han adquirido en los últimos días de cara a las próximas elecciones nacionales españolas». También permite leer entre líneas que la comisión parlamentaria había organizado este viaje por su cuenta y sin consultar antes con el Gobierno.

Fuentes diplomáticas alemanas confirman que la comisión parlamentaria había «perdido el control» de su viaje y que cambió de parecer tras conocer la gran repercusión mediática.

Aunque no es posible precisar el desempeño de la cadena de mando relacionada con la decisión, sí parece claro que la Embajada de Alemania en Madrid ha jugado un papel en el asunto. Ni en el Ministerio alemán de Exteriores, ni en el de Medio Ambiente, ambos en manos del partido Los Verdes, se reconoce haber intervenido en el aborto de la misión parlamentaria, aunque fuentes de ambas oficinas comentan la falta de experiencia en asuntos internacionales de los miembros de la comisión como posible motivo de los efectos indeseados del viaje.

En todo caso, los nueve miembros de la delegación, que ya estaban en Madrid desde el domingo, siguieron el lunes con su programa y permanecen en España, disfrutando de las comidas, visitas turísticas y dietas que supone el viaje al menos hasta mañana. La comisión realiza dos viajes anuales y, según insistió el Parlamento alemán en su comunicado, el viaje estaba «largamente planeado».

La patata caliente, por tanto, queda en el Bundestag, desde el que algunas fuentes se reconocen «sin saber bien qué hacer» y aseguran que la comisión está recibiendo, sobre la marcha, peticiones desde Andalucía de seguir con lo planeado.

Por ejemplo la Plataforma en Defensa del Riego Comarcal, que agrupa a regantes de municipios de la Corona Norte de Doñana, solicitó este lunes a través de dos cartas una reunión con la comisión de diputados alemanes, a los que se ofrece a mostrar como guía el espacio natural.

El presidente de la Plataforma, Romualdo Macías, se dirigió a los presidentes del Bundestag, Bärbel Bas, y de la comisión de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza, Seguridad Nuclear y Protección del Consumidor, Harald Ebner, solicitando una reunión para «poder explicar de primera mano el objeto de la propuesta de ley y su alcance, así como su importancia e impacto económico y social de los frutos rojos en la área». En las cartas llegadas a Berlín explica que los cultivos de frutos rojos «están ahora en riesgo por la actuación negligente del Gobierno de España» y que «lo mismo ocurre con la supervivencia del Espacio Natural de Doñana, en peligro por el incumplimiento reiterado de la ley y sus responsabilidades por parte de dicho Gobierno».

Por ahora la delegación solo tiene la versión del Gobierno, aunque el anuncio de la cancelación cogió por sorpresa al Ministerio para la Transición Ecológica. El comunicado llegó apenas minutos antes de que comenzara la reunión con el secretario de Medio Ambiente, Hugo Morán.

El encuentro con el secretario de Estado de Medio Ambiente se mantuvo, al igual que el de la tarde con el secretario de Estado de Consumo, Rafael Escudero, pero según fuentes ministeriales, el papel de Morán fue de escucha. Y, según relató después la propia ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, el nombre de Doñana no salió a relucir durante el encuentro. Hablaron de eficiencia, de los planes hidrológicos, de reutilización del agua y de los problemas que se identifican en un contexto de cambio climático.

Fuentes de la Moncloa reiteraron que la decisión de cancelar parcialmente la visita salió de los diputados alemanes, si bien no aclararon si previamente había habido contactos con el el Gobierno, informa Mariano Alonso. Lo cierto es que, desde su llegada a Madrid, el grupo intentó mantener un perfil bajo. Se negaron a dar declaraciones a la prensa a la entrada y salida de las reuniones, y fuentes del Bundestag explicaron a ABC que el grupo no sabía el clima sociopolítico en torno a los cultivos de Doñana. Los diputados estaban «un poco preocupados» por la expectativa «evidentemente muy grande» que habían generado, según Ribera.

Tras haber criticado duramente por la mañana al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, a quien Ribera acusó de «tontear y poner en riesgo» a los regantes españoles, a la reputación de España y a Doñana, por la tarde, en cambio, felicitó al grupo alemán por la cancelación de la visita. En concreto, la vicepresidenta tercera agradeció a los diputados que «en este momento» y con un asunto «sensible» que puede dar origen a «interpretaciones erróneas», la delegación decidiera cancelar el viaje a Andalucía. El pasado domingo, en cambio, Transición Ecológica comunicó que «no valora las iniciativas del Parlamento de un Estado Miembro de la UE, ni opina sobre si es conveniente o no que dicha visita se produzca en periodo electoral».

Desde que se conociera el viernes la visita de la comisión parlamentaria, el malestar en España había ido creciendo, entre críticas tanto de la oposición como de agrupaciones agrarias como Asaja por la posible injerencia en la política española.

Inicialmente, el viaje iba a extenderse de lunes a viernes, e iba a suponer un tour por Madrid, Sevilla y Almería. El enfoque de la de investigación era, textualmente, «la escasez de agua y la protección del consumidor». Ayer, sin embargo, el comunicado alemán explicaba que el objetivo del viaje era «intercambiar información técnica» sobre «el cambio climático y sus consecuencias». Y destacaba el «profundo respeto mutuo por las instituciones y los procesos democráticos». La visita, dijeron, queda solo aplazada «por el momento».