La Aemet avisa del desplome térmico que llega en julio: hasta 8 grados menos en estas zonas

Tras el paso de la primera ola de calor del verano, este viernes ha comenzado a sentirse con más intensidad la llegada de un frente frío a la Península, que ha aumentado progresivamente la inestabilidad en algunos puntos del país. Así, las temperaturas han comenzado a disminuir hasta valores habituales para la época, dejando lluvias que podrían ser localmente intensas, especialmente en el nordeste peninsular. En ciertas zonas, llegarán acompañadas de tormentas y granizo.

Tras la primera ola de calor del verano, el tiempo en el norte de España ha dado un completo giro radical, donde los termómetros se quedarán este fin de semana en torno a los 20 grados. No así en el sur, donde las temperaturas seguirán rozando los 40ºC, dejando muchas diferencias entre las dos mitades peninsulares.

Aunque se espera que las temperaturas bajen respecto al pasado domingo, será en el tercio norte peninsular donde más se notará esta bajada en los valores. En ciudades como Huesca, Cuenca, Guadalajara, Madrid, Zaragoza o Toledo los termómetros podrían descender entre seis y ocho grados frente a los últimos días.

En el Cantábrico y alrededores las temperaturas podrían quedarse en torno a los 20ºC de máxima, con nubes que se extenderán hasta la mitad oeste de los Pirineos. Por su parte, Córdoba volverá a ser una semana más la provincia donde más calor haga, con temperaturas de en torno a 38 grados, seguida de otras como Sevilla y Badajoz.

Cambios también respecto a las noches tropicales de los últimos días, que irán desapareciendo con la bajada de temperaturas del fin de semana. Sin embargo, en el Mediterráneo y el Valle del Guadalquivir seguirá registrándose este calor nocturno, que dejará mínimas por encima de los 20ºC.

La llegada de este frente frío a España también dejará precipitaciones localmente intensas este fin de semana, especialmente en zonas del nordeste peninsular.

Según la Aemet, este viernes 30 de junio «se esperan chubascos y tormentas localmente fuertes en el este de Cataluña y Baleares». La inestabilidad aumentará a partir del domingo, dejando «nubosidad de evolución en el interior peninsular y en Mallorca, y probables chubascos y tormentas, más intensas en los entornos del sistema Central y sur del Ibérico».

Las zonas montañosas de los Pirineos y el Sistema Ibérico serán las más afectadas e incluso podrían venir acompañadas de granizo. Por su parte, en el Cantábrico y en zonas del centro y Mediterráneo norte (Cataluña) también podrían llegar estas lluvias.

De cara a la próxima semana se mantendrán también estas nubes bajas en el extremo norte, con lluvias débiles en el Cantábrico. Además, estos chubascos podrían extenderse del noreste peninsular al Sistema Central a partir del lunes 3 de julio.