Vitoria cierra todos los centros escolares durante 15 días por el coronavirus

Desde el área de Salud del Ejecutivo vasco incidieron este lunes en que estas medidas «extraordinarias» afectan sustancialmente a la ciudad de Vitoria, que en las últimas fechas ha registrado 43 nuevos positivos de Covid-19 -en total hay 122- y hasta tres muertes. La orden de suspender las clases y actividades extraescolares es «en principio» temporal, manifestó en rueda de prensa la consejera Nekane Murga, que insistió en que se trata de una decisión «crucial» para contribuir a la contención del virus entre la comunidad escolar en la capital alavesa.

La medida confirma la creciente preocupación en la administración autonómica por la posible propagación del patógeno entre niños y jóvenes, especialmente expuestos por el hecho de pasar muchas horas en recitos cerrados. De hecho, Salud confirmó que tres menores de la Comunidad Autónoma ya han dado positivo en Covid-19, aunque no ofreció detalles sobre dónde viven. Todos ellos se encuentran «en buen estado», precisó Murga. El mayor problema no es que se contagien, «que también», sino que transmitan el coronavirus en sus hogares a grupos de mayor riesgo como ancianos o personas con patologías crónicas.

Solo Vitoria suspenderá las clases, aunque las autoridades sanitaras recomendaron a los padres del resto del territorio que tomen la temperatura a todos los niños antes de ir a su centro escolar. Si superan los 37 grados o presentan síntomas respiratorios deben permanecer en casa, apuntaron.

La medida del Gobierno vasco supone un imprevisto para los alumnos, pero también para muchos padres que no tienen forma de conciliar con sus trabajos. Es el caso de Lucía Arregi, madre de una alumna del colegio Sagrado Corazón, que lamenta que no tiene con quién dejar a su hija pequeña por las mañanas. «Es todo un desastre, nos han avisado hoy mismo -este lunes-de que se iban a cancelar las clases y nada más».

Crece también la inquietud entre los padres y madres del colegio La Inmaculada, que reconocen sentirse algo «escépticos» ante las últimas noticias que les llegan. «Hay cierto malestar -admite Ismael Olivenza, del Ampa-. No por el cierre, porque al final es una decisión que hay que aceptar, pero sí con lo que respecta a la conciliación». En todo caso, destaca que han comenzado a trabajar para conocer los derechos que tienen los empleados con sus respectivas empresas «y si es posible algún tipo de conciliación».

Las medidas de prevención no afectan solo al área educativa. Según informó Salud, también se han implementado restricciones en centros hospitalarios. Desde este momento no se permitirá el acceso de acompañantes a las urgencias del centro de Txagorritxu, uno de los focos principales de la epidemia en el territorio. Se recomienda asimismo reducir «al máximo» el número de visitas al resto de centros sociosanitarios.

En las urgencias de los centros sanitarios de Vitoria se ha establecido el uso «generalizado» de mascarillas y guantes por parte de los profesionales que traten con pacientes con procesos respiratorios agudos.