El Tribunal Vaticano desestima todos los recursos del cardenal Angelo Becciu y lo procesará

Una respuesta larga, casi una hora y media, que han leído turnándose en el tribunal construido en una sala de los Museos Vaticanos para asegurar el distanciamiento. Y una a una han desestimado todas las objeciones presentadas por los acusados a lo largo de los últimos casi 8 meses .

La mayoría eran objeciones formales , relativas a vicios de forma en la formulación de las acusaciones por parte del fiscal. Otras eran más sustanciosas y lamentaban que el fiscal había conseguido del Papa permisos especiales para obtener pruebas con mecanismos que no reconoce el código vigente en el Estado Ciudad del Vaticano, como por ejemplo de interceptaciones telefónicas. Mientras tanto, el proceso seguirá adelante, los abogados se han reservado el derecho de impugnar la decisión .

El presidente del tribunal, Giuseppe Pignatone ha explicado que dividirá el proceso en tres apartados. Uno se refiere a las irregularidades en la operación de la compra de un edificio en Londres, en la que el Vaticano perdió 217 millones de euros ; otro, los misteriosos pagos a la supuesta espía y mediadora en secuestros Cecilia Marogna; y el tercero, el posible delito en el envío de donativos a la Caritas de Ozieri, diócesis de origen del cardenal Angelo Becciu, y a la cooperativa Spes del hermano del purpurado.

También Pignatone ha explicado a los abogados defensores que desea comenzar con los interrogatorios de los acusados que ya estén dispuestos a testimoniar.

El primero que se ha presentado es el cardenal Angelo Becciu, a quien en septiembre de 2019 el Papa Francisco retiró los derechos y deberes ligados al cardenalato precisamente por este caso. Becciu está acusado de malversación, abuso de poder y presiones a un colaborador para que diera falso testimonio.

El cardenal sardo será interrogado por el tribunal el 17 de marzo, sobre las cuestiones relativas al envío de fondos su diócesis y a la cooperativa de su hermano. Es la primera vez que un tribunal del Vaticano interroga a un cardenal sentado en el banquillo de acusados .

«Por fin llega la hora de decir la verdad», ha asegurado Becciu a la salida del tribunal. «Llevo 7 meses esperando (el proceso comenzó en julio de 2021), y finalmente podré hablar, estoy contento», añadió.

El abogado de Cecilia Marogna ha asegurado que su cliente no puede ser interrogada y que ha escrito a la Santa Sede , al gobierno italiano y a la OTAN, pues —asegura— tiene un supuesto «vínculo de secreto» y teme por su vida si lo rompe.

Quizá el presidente del Tribunal, Giuseppe Pignatone, lo ha percibido como un farol, pues ha respondido en tono informal que en estas semanas la OTAN está ocupada con otras cosas, y no será fácil que resuelva esta cuestión.

En la ordenanza, Pignatone menciona dos recientes sentencias, una de una corte italiana y otra de un tribunal suizo, relativas a algunos los acusados de este proceso. A Pignatone le interesan pues mencionan que el proceso que se celebra en el Vaticano es justo y da garantías a los abogados defensores. Aunque, por ahora, ninguna de sus solicitudes ha sido acogida.