«Ha sido un error no tener criterios claros sobre cuándo actuar»

La falta de criterios homogéneos no es única en Europa . Aunque se planteó una hoja de ruta común con criterios objetivos, cada país ha decidido por su cuenta. Algunos como Francia han optado por crear una suerte de «semáforo» que miden el nivel de alerta a partir de los 50 casos por cada 100.000 habitantes. O Alemania, que entre otros criterios, se centra en la velocidad de transmisión del virus, el famoso índice «R» que no debe superar el valor de 1. Si lo hace, significa que cada persona contagiada transmite la infección a otra.

En España son numerosas las voces de expertos que desde el fin del estado de alarma llevan pidiendo indicadores transparentes para cuantificar el riesgo en cada comunidad y evitar un debate político, como el que se ha vivido las últimas semanas entre la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Sanidad. Centrado en este caso si 500 casos por 100.000 habitantes era mucho o poco para confinar una ciudad como la capital de España. «Ha sido un error no tener criterios claros sobre cuándo actuar» , reconocía a ABC el especialista en Salud Pública, José Martínez Olmos. Él fue uno de los primeros en plantearlo con otros expertos. El acuerdo que ayer anunció el ministro de Sanidad, Salvador Illa, es un buen paso en ese sentido. «Los criterios enunciados parecen razonables. Incorporar nuestras reflexiones sobre la necesidad de definir indicadores y umbrales explícitos para la toma de decisiones», dijo.

Los indicadores que se plantean son número de ingresos en UCI, positivos diagnosticados por PCR y tasa de contagios que se ha establecido en 500 caso por 100.000 habitantes.

Esta última referencia se antoja demasiado generosa, en opinión de Salvador Macip, médico e investigador de las Universidades de Leicester y la UOC. Macip recuerda que en el Reino Unido las alarmas se disparan cuando se pasa de cien casos por 100.000 habitantes y se recomienda hacer cuarentena cuando se viaja a un país con una incidencia acumulada de más de 50 casos por 100.000 habitantes. Madrid tiene más de 780 casos, «hace tiempo se tendrían que haber tomado restricciones más duras». «Es una buena idea contar con indicadores comunes en un país, pero lo mejor sería que fueran internacionales. Servirían en Madrid, Londres y en Singapur».

«Sería fácil que un equipo de epidemiólogos acordaron unos criterios básicos internacionales. Otra cosa es que haya acuerdo político internacional, ya hemos visto lo difícil que es un acuerdo entre una comunidad y el Gobierno central», recuerda Daniel López Codina, del grupo de investigación de biología computacional y sistemas complejos de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC). Este grupo mide la evolución de la pandemia con un mapa de riesgo por autonomías. En su escala de riesgo detrás de Madrid está Navarra, La Rioja, Castilla-La Mancha, Murcia y Castilla y León.